Elecciones generales
El giro a la izquierda de C’s: roba 161.000 votos al PSOE y regala al PP 341.000
El 22,5% de los electores que confiaron en Rivera en diciembre optarán por otra opción el 26-J
La abstención y el PP se comen a Ciudadanos. Desde el pasado 20 de diciembre, la formación liderada por Albert Rivera ha ido perdiendo fieles con el paso de los meses y cuando quedan 23 días para que los españoles vuelvan a votar, el partido naranja se ha dejado en el camino 790.000 votos. De ellos, 341.00 corresponden a ex simpatizantes de C’s que, descontentos, han decidido votar a los populares y otros 321.000 que en esta ocasión optarán por abstenerse.
Es la radiografía de la situación electoral de la formación que se desprende del último sondeo de NC Report para LA RAZÓN, el cual muestra no sólo que esas pérdidas supongan un 18,8 por ciento de su caudal electoral de C’s del 20-D, sino que también cuantifica que los de Rivera trasvasan más votos al PP que los que reciben de los populares, pues los descontentos con Mariano Rajoy que ahora elegirán la papeleta de Rivera apenas son 198.000.
Pero, sobre todo, una de las claves de este sondeo es la confirmación de ese «giro a la izquierda» de Ciudadanos, que quedó plasmado por el fallido acuerdo de investidura con los socialistas de Pedro Sánchez. Ese pacto de «El Abrazo» que ahora podría ahogar a Rivera. Y es que ya son 161.000 los ex votantes del PSOE que el próximo 26 de junio cambiarán de opción y optarán por los naranjas.
De esta forma, mientras pierde esos 341.000 seguidores que se van al PP, recupera la mitad del PSOE, por lo que su «caída» no llega a ser tan fuerte. Eso sí, Rivera y los suyos son los que menos fieles han logrado mantener a lo largo de estos seis meses de inestabilidad, incertidumbre y pactos fallidos: únicamente conserva al 77,5 por ciento de los que depositaron su confianza en C’s, unos 2.725.000 de electores, frente a los más de 3,5 millones que les apoyaron el 20-D.
Y fue ese pacto con los socialistas el que más afectó y sorprendió a su electorado, que no entendía cómo llegaban a un acuerdo de investidura con una formación a la que siempre habían criticado y con lo que incumplía su promesa de no ayudar a convertir en presidente a Pedro Sánchez. No lo consiguió, pero lo intentó.
Más pérdidas
Son principalmente el PP y la abstención los que más daño hacen a Rivera, aunque los que no votarán el 26-J los sufren todas las formaciones en mayor o menor medida. Pero también pierde Ciudadanos otros 55.000 votos que van a parar a la bolsa socialista y otros 42.000 que en esta ocasión depositarán su confianza en la nueva coalición Unidos Podemos. Estas dos pérdidas se traducen en un 2,8 por ciento menos de sufragios, a las que habría que sumar otros 31.000 votos (el 0,9 por ciento).
Todo, en conjunto, da como resultado esos casi 800.000 votos menos en seis meses, pero a tenor de las encuestas, de aquí al 26-J podrían seguir perdiendo fuerza y apoyos, pues los últimos trackings electorales de NC Report muestran cómo desde abril han ido dejándose fieles semana a semana. Sólo en un mes perdieron casi dos puntos.
Unas pérdidas que llevan a Ciudadanos a tener que agarrarse a un clavo ardiendo –al menos según se desprende de las encuestas– y que incluye, entre otros, unos 106.000 ciudadanos que no participaron en las últimas elecciones y que en éstas sí que votarán. Los nuevos parecen ser su objetivo para tratar de frenar esa caída que parece no tener fin.
Eso o la opción que planteaba ayer el presidente de Ciudadanos en Andalucía, Juan Marín, quien explicó que «los españoles quieren una gran coalición formada por PP, PSOE y Ciudadanos» para gobernar después de las próximas elecciones del 26 de junio, informa Servimedia.
Aunque su optimismo creció cuando llegó a afirmar que no descartaba que dicho Ejecutivo estuviese presidido por el líder nacional de su partido, Albert Rivera.
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