El PP endurecerá las penas para los motines en las cárceles

El PP ha presentado una enmienda al proyecto de ley de reforma del Código Penal por la cual se endurecerán las penas para aquellos que participen en un motín en prisión, que se enfrentarán a condenas de hasta cuatro años de cárcel.

En la enmienda, los populares proponen la modificación del artículo 551 del Código Penal que hace referencia al delito de atentado contra la autoridad, para incluir un agravamiento de la pena «cuando los hechos se lleven a cabo con ocasión de un motín, plante o incidente colectivo en el interior de un centro penitenciario». Los populares consideran que se trata de un subtipo agravado «debido al plus de peligrosidad» y que merece un «mayor reproche» cuando se comete el delito en este contexto.

Con esta enmienda, el PP pretenden ofrecer «una respuesta contundente a todos aquellos supuestos de atentado en los que concurren circunstancias de las que deriva su especial reprochabilidad» como, cita el texto, «cuando los hechos se lleven a cabo con ocasión de un motín, dentro de algún establecimiento penitenciario». En relación con el delito de atentado contra la autoridad, los populares también han propuesto la supresión del agravamiento de las penas «cuando los hechos se lleven a cabo en una manifestación o reunión numerosa, o con ocasión de alguna de ellas», que figuraba en el texto aprobado por el Pleno del Congreso. Los populares consideran que la pena mínima de tres años y un día «podría resultar desproporcionada» en algún supuesto, informa Efe.

Por otra parte, el ministro del Interior, Jorge Fernández inauguró en Tarragona la exposición de «La Guardia Civil frente al terrorismo, por la libertad, por las víctimas», que rinde homenaje a los familiares, personas vinculadas y miembros del Instituto Armado que fueron víctimas del terrorismo. Fernández Díaz aseguró que el Gobierno no va a esperar ningún simulacro de la banda terrorista ETA de hecho, «toda la maquinaria del Estado de Derecho» está trabajando con las «autoridades francesas» para que si no se hace «por las buenas, será por las malas». «La Guardia Civil y la Policía Nacional» se bastan para hacerse cargo de esas armas y certificar su entrega. Fernández Díaz reiteró que ETA es un «cadáver» del que sólo queda «su certificado de defunción» y aseguro que el terrorismo no cabe en la civilización y recordó que «hoy la civilización occidental se enfrenta y se opone al terrorismo yihadista». El titular de Interior homenajeó a los 243 guardias civiles asesinados en actos terroristas,con una exposición que viene recorriendo toda la geografía española. En ella se pueden visionar documentos audivisuales, de la lucha de la Benemérita contra el terrorismo, los medios de los que dispone y las consecuencias de los diferentes atentados.