El PSC da más oxígeno a la consulta soberanista

Gracias a una carambola del PSC, el Parlament de Cataluña amplió ayer los votos a favor del derecho a decidir. Los socialistas catalanes presentaron un calco de la resolución que el Congreso de los Diputados rechazó el pasado 26 de febrero con los votos del PP y del PSOE. La misma que causó un seísmo en las filas socialistas, cuando 13 diputados del PSC –todos excepto Carme Chacón– rompieron por primera vez la disciplina de voto con el PSOE al apoyar el texto que entonces impulsó CiU.

La resolución del PSC que apoya el derecho a decidir a través de una consulta legal y acordada entre la Generalitat y el Gobierno de Mariano Rajoy contó con 104 votos a favor, 27 en contra y las tres abstenciones de los anticapitalistas de la CUP. El PSC recopiló los apoyos que el texto obtuvo en Madrid, de CiU, ERC e ICV. PP y Ciutadans votaron en contra tras lamentar que el PSC «se adhiera a la loca carrera separatista» y acusar al primer secretario de los socialistas catalanes, Pere Navarro, de ser «el tonto útil» del independentismo.

Navarro fue el encargado de presentar la propuesta que insta a la Generalitat a dialogar con el Gobierno para facilitar la celebración de una consulta soberanista y en el marco constitucional. Aunque la cámara catalana aprobara por una amplia mayoría la resolución –con 104 de los 135 diputados–, entre los partidarios del derecho a decidir se vislumbraron las discrepancias sobre el cómo y el cuándo debe celebrarse la consulta soberanista.

El primer secretario de los socialistas catalanes presentó el debate admitiendo que «tengo un sentimiento contradictorio». Porque pese a sentirse «orgulloso» de que el Parlament reúna una amplia mayoría a favor de la consulta, tiene clavada la espinita de la declaración soberanista. Navarro reprochó a CiU y ERC que en el primer texto a favor del derecho a decidir, que se votó el 23 de enero, se empeñaran en definir Cataluña como «sujeto jurídico y político soberano». El PSC no apoyó la declaración que el Gobierno del PP ha llevado ante el Constitucional, por considerar que era ilegal, pero cinco de sus diputados rompieron la disciplina de voto.

Navarro defendió que el texto que se aprobó ayer defiende una consulta legal. Subrayó que el PSC es un partido demócrata y federalista, que apoya el derecho a decidir, pero que cuando se celebre la consulta defenderá el «no» porque no es independentista. Consciente de la dificultad que conlleva convocar una consulta –«nadie mejor que yo lo sabe», dijo, después de haberse enfrentado al PSOE–, animó a Mas a hacer pedagogía dentro de España y dejarse de su periplo internacional. Aunque Mas no estaba. El president de saltó la votación y tanto ERC como el PP dieron un perfil bajo al debate, dejándolo en manos de sus segundas espadas. «Antes de dar lecciones de democracia, convenza a Chacón y Rubalcaba de que debe celebrarse la consulta», le reprochó el PP, dejándole en entredicho.

PP y C's bautizan a Navarro como «el tonto útil del soberanismo»

«La primera votación a favor del derecho a decidir dividió al PSC. La de hoy divide al PSOE». En dos frases resumió el popular Santi Rodríguez las consecuencias políticas de las dos votaciones que se han celebrado en el Parlament a favor de la consulta soberanista. La votación del 23 de enero causó un terremoto en el PSC, cuando cinco diputados se rebelaron contra Pere Navarro, que había decidido no apoyar la declaración porque definía Cataluña como «sujeto político y jurídico soberano», una definición que el PP ha llevado al Constitucional. Ayer se votó texto que CiU presentó en el Congreso el 26 de febrero y que PP y PSOE rechazaron. Fue el día en que los 13 diputados del PSC rompieron la disciplina de voto. PP y C's llaman a Navarro el «tonto útil» del soberanismo porque en vez de beneficios, estas votaciones le crean problemas.