Sánchez acercará a presos etarras enfermos, de avanzada edad y con un cumplimiento avanzado de la condena

Sánchez ha defendido que «antes de fijar posición hay que escuchar y contar con la voz del Parlamento», para forjar «consensos tan amplios como seamos capaces».

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha confirmado esta mañana en el Congreso de los Diputados que su Ejecutivo ya prepara el acercamiento de presos etarras a cárceles del País Vasco. Este traslado de reclusos será individualizado, en función de las circunstancias personales de cada uno de ellos. En concreto, el presidente ha señalado que serían objeto de este acercamiento aquellos presos de avanzada edad, más de 70 años, los que padezcan una grave enfermedad y los reclusos que hayan cumplido gran parte de su condena. Estos condicionantes relegan otros que se exigían hasta ahora, para acogerse a la llamada “vía Nanclares”, como renegar de la violencia o o reconocer el daño causado. Sánchez ya defendió ayer en Alemania un cambio en la política penitenciaria porque “la realidad es ya completamente distinta”.

Durante la sesión de control, el diputado popular Javier Maroto ha preguntado sobre esta misma cuestión al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska. Maroto se ha referido en su intervención a la información que hoy publica La Razón sobre cómo los presos de ETA podrán obtener beneficios penitenciarios sin necesidad de repudiar a ETA: “¿Qué cree que piensan las personas que han vivido el terrorismo en primera persona cuando leen esto?”. Maroto ha insistido además en que “las víctimas no pueden ser el pago a la nacionalistas” y ha instado al Gobierno socialista a que tenga en cuenta que “la normalización” en el País Vasco en ningún caso puede pasar por “contentar a los presos”.

El ministro Grande-Marlaska ha pedido al diputado popular que “no utilice a las víctimas del terrorismo”. Además, el responsable de la cartera de Interior ha avanzado su intención de dar cumplimiento en lo que se refiere a los presos de ETA con el “principio de legalidad” y con la transparencia a la hora de explicar a las víctimas cuáles serán los requisitos para llevar a cabo el acercamiento de estos reclusos así como la eventual concesión de permisos. Grande-Marlaska ha desvelado que el anterior ministro del Interior ya había solicitado a Instituciones Penitenciarias informes sobre la situación de algunos presos de ETA, en concreto, sobre los más mayores o aquellos que ya han cumplido la mayor parte de su condena. Ha aclarado, no obstante el ministro, que estos acercamientos se podrán llevar a cabo de un modo “individualizado”.