Iglesias someterá a los más de 300.000 inscritos en la web su acuerdo con el líder del PSOE

«Proporcionalidad» se ha convertido en un concepto clave que debe permear cualquier negociación entre Podemos y PSOE de cara a una eventual investidura de Pedro Sánchez como presidente del Gobierno. «Proporcionalidad» viene a significar que, para ser jefe del Ejecutivo, el secretario general socialista deberá ceder el 50% de los sillones en el Consejo de Ministros a un partido emergente que tiene como principal objetivo político fagocitarle y convertirse en la referencia de la izquierda. Para Iglesias los resultados electorales del 20 de diciembre imponen que el peso de PSOE y Podemos en lo que el llama «el Gobierno del cambio» deba ser equiparable, ya que entre ambas formaciones sólo hubo 300.000 votos de diferencia. Es necesario apuntar que Iglesias siempre hace referencia en este contexto a los votos logrados por Podemos y las tres confluencias regionales, una de las cuales (Compromís en Valencia) ya se ha disuelto. Lo contrario, que Podemos apoye la investidura de Sánchez pero se mantenga fuera del Ejecutivo, no cuadra con los planes de Pablo Iglesias: «No creemos en esa vía, en la vía portuguesa. La garantía de algo es que haya gobiernos distintos», dijo el líder de Podemos en una entrevista concedida a la Cadena Ser. Durante la rueda de prensa en la que hizo pública la oferta el pasado viernes, Iglesias mencionó las carteras de Economía, Sanidad, Educación y Servicios Sociales, además de la dirección de Radio Televisión Española y un ministerio de «Plurinacionalidad» con que contentar a sus socios de Barcelona En Comú.

Sin embargo, Iglesias se mostró flexible en el resto de exigencias que ha enumerado para apoyar a Sánchez, señaladamente la del referéndun en Cataluña que le exigen sus socios independentistas. «Tenemos propuestas que vamos a defender con firmeza, no líneas rojas», explicó. En cualquier caso Iglesias se mostró partidario de «que Cataluña sea reconocida como nación en el marco de un nuevo encaje constitucional en España». En un artículo publicado en «El País», el secretario general de Podemos se dirigió a las bases socialistas, a las que no se avergonzó en cortejar cuando confesó abiertamente «admirarlas». Al mismo tiempo admitió que «no tenían mucha «confianza en el aparato del partido» ni en sus «élites».

Iglesias se comprometió a que cualquier tipo de pacto con el PSOE y con Izquierda Unida será refrendado por los inscritos de Podemos, tal y como estipula su Código Ético. En este sentido, los más de 300.000 inscritos en la web de la formación morada serán consultados respecto al apoyo al líder del PSOE para formar Gobierno.