Informadores de las mafias preparan las avalanchas de inmigrantes en Ceuta y Melilla

Sin fecha para la sustitución de las concertinas en los vallados, que mantendrá Marruecos

Tras la última avalancha de inmigrantes producida en Ceuta se investiga la existencia de informadores en el interior de la Ciudad Autónoma y al otro lado de la frontera.
Según han informado a LA RAZÓN fuentes presenciales, nada de lo ocurrido fue casual ya que el salto se produjo en el momento preciso, aprovechando un “despiste” de las Fuerzas de Seguridad marroquíes y en el momento del relevo de los GRS (Grupos Rurales de Seguridad) de la Guardia Civil.
Esos “informadores” trabajan para las mafias de la inmigración que comunican a los cabecillas los momentos y lugares idóneos para intentar las entradas ilegales en España.
Por otra parte, nada nuevo sobre la retirada de las concertinas de los vallados de Ceuta y Melilla, según han reconocido a LA RAZÓN medios próximos al Ministerio del Interior que informaron en su momento que hasta otoño no estará dispuesto el proyecto para cambiar la medida disuasoria. En cualquier caso, de lado marroquí se mantiene este tipo de dispositivo.
La sustitución de las concertinas de los vallados de Ceuta y Melilla, una de las promesas “estrella” del Gobierno socialista nada más llegar al poder tras la moción de censura contra Rajoy, tendrá, por lo tanto, que esperar. En cualquier caso, está por comprobar si el sistema que se va a colocar logra frenar las avalanchas de inmigrantes.
La demora (el ministro Grande-Marlaska anunció en febrero que las obras se iniciarían durante la pasada campaña electoral, lo que ya suponía un gran retraso) se debe a la “lentitud de la Administración” y a que, en un asunto tan complicado y mediático, las cosas se quieren hacer bien, mediante la articulación de un sistema alternativo eficiente y tras la consulta con los expertos en la materia, en especial los que están “sobre el terreno”, según reconocieron en Interior.
La Secretaría de Estado de este departamento fue la que puso en marcha el proceso de sustitución con una resolución en la que se anunciaba la “realización de los trabajos de elaboración de estudio técnico y redacción de propuesta técnica (por valor de más de 70.000 euros)”. El proyecto fue encargado al departamento de Ingeniería de Sistemas para la Defensa de España (ISDEFE).

La supresión de las concertinas, una promesa con una gran fuerza mediática, se ha demostrado como un auténtico “laberinto” para el ministerio de Grande-Marlaska.
Además, en este tiempo se ha producido un hecho que pone en cuestión la iniciativa. La colocación de concertinas en el puerto de Melilla, acometido por la Autoridad Portuaria, ha reducido las intrusiones en un 92% en sólo un año, lo que demuestra que la decisión de blindar las instalaciones “ha dado sus frutos”, según dicha Autoridad.
Los sucesivos y continuos incrementos, que alcanzaron “la cifra récord” de 3.122 polizones en enero de 2018, obligaron a tomar “una decisión drástica” para “blindar el puerto con todos los medios que nuestro Estado de Derecho y legislación nos otorga”. Entre las medidas adoptadas se incluyó la colocación de concertinas. De 3.122 intrusiones se pasó a 244 un año después.