Interior
Interior blinda con 3.500 agentes los colegios en Cataluña
Los colegios tendrán especial protección para evitar incidentes ante la ofensiva anunciada por Tsunami.
Los colegios tendrán especial protección para evitar incidentes ante la ofensiva anunciada por Tsunami.
Un total de 2.500 agentes del Cuerpo Nacional de Policía forman parte del dispositivo reforzado que el Ministerio del Interior ha organizado para prevenir incidentes en Cataluña durante el proceso electoral de este fin de semana, según han informado a LA RAZÓN fuentes de la investigación. A esta cifra hay que añadir los 1.000 de la Guardia Civil, entre ellos decenas de componentes de la Agrupación Rural de Seguridad (ARS); y los que desplieguen los Mossos d’ Esquadra, que tienen atribuida la competencia de seguridad ciudadana en esta Comunidad Autónoma, en una cifra bastante superior.
El CECOR (Centro de Coordinación), en el que están representadas todas las unidades, en algunos momentos a nivel de sus máximos jefes en Cataluña, se reactiva este fin de semana para hacer un seguimiento de los posibles incidentes que puedan protagonizar grupos extremistas y similares; y articular la correspondiente respuesta.
Para ello, los Servicios de Información de los tres cuerpos realizan desde hace días un trabajo intenso para obtener datos sobre los planes de los citados grupos, con el fin de que se pueda actuar con conocimiento de causa y articular el correspondiente dispositivo de control y respuesta.
En principio, se cree que los extremistas, al responder a un llamamiento de Tsunami Democratic, van a concentrar las protestas en la jornada de reflexión del próximo sábado.
La plataforma mediática pretende hacer creer que esas movilizaciones finalizarán a las diez de la noche y que, a partir de ese momento, todo el mundo se irá a su casa tan tranquilo y se respetará la jornada electoral del domingo. Los expertos, por lo ocurrido en el pasado, no se fían y tendrán todo preparado por si algún grupo trata de ocupar los locales en los que van a estar las urnas en las que los ciudadanos depositarán su voto. Si provocaran incidentes , estarían cometiendo un delito electoral y las Fuerzas de Seguridad podrían proceder a su inmediata detención sin ningún trámite previo.
Por ello, Tsunami se ha cuidada de indicar en su convocatoria que de lo que se trata es de organizar «una jornada de desobediencia a la Junta Electoral y llenar de 16:00 h a 22:00 h las plazas del país con una jornada política, cultural y festiva». «Si la represión del Estado no se detiene por la jornada de reflexión, tampoco se detendrá la gente. En contra de la represión y en contra de la mordaza: palabras, ciudadanos y cultura en libertad. Pacíficamente, respetuosamente, de forma inequívocamente no violenta».
Otra cosa, añaden las fuentes consultadas, es lo que ocurra. El problema es que, una vez puesta en marcha la «maquinaria» de las protestas, en las que participan grupos, mayoritariamente independentistas pero entre los que habrá, según anunciaron, también anarquistas, no es tan fácil de detener. Como es habitual, se trabajará con la peor de las hipótesis y, si es necesario, se actuará desde el dispositivo de control y respuesta. Por otra parte, el Ministerio del Interior ha ordenado el paso a 4 reforzado del nivel de alerta antiterrorista en toda España, con motivo de la celebración de las elecciones generales. Cataluña es un objetivo permanente de las amenazas yihadistas.
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