La Ley de Consultas catalana llega al pleno del Parlament

La Ley de Consultas llega al pleno del Parlament el miércoles parar someterse a las enmiendas a la totalidad de PPC y Ciutadans, que serán rechazadas, por lo que seguirá el trámite para que se apruebe en otoño.

La Ley de Consultas, una de las herramientas claves del Govern en su agenda soberanista, llega al pleno del Parlament este miércoles parar someterse a las enmiendas a la totalidad de PPC y Ciutadans, que serán rechazadas, por lo que seguirá el trámite con la previsión de que se apruebe en otoño.

Según fuentes parlamentarias consultadas por Efe, esta es la agenda con la que trabajan los grupos que han impulsado la iniciativa, respaldada por CiU, ERC, ICV-EUiA y CUP.

Los socialistas catalanes también la apoyan pero con reservas, porque quieren asegurarse de que esta norma no sirva para celebrar una consulta soberanista sin la autorización del Gobierno central.

Sin embargo, este proyecto de ley figura como una de las cinco vías que el Instituto de Estudios Autonómicos de la Generalitat (IEA) apuntó para poder celebrar una consulta de autodeterminación en Cataluña de forma legal, entre las que también están la autorización de un referendo por parte del Estado o la transferencia a la Generalitat de las competencias en esta materia.

Resultado no vinculante

Aunque el resultado no sería vinculante jurídicamente, la ley en trámite sería prácticamente la única vía que permitiría a la Generalitat convocar una consulta sin una autorización explícita del Estado, aunque sería necesario que el Gobierno se abstuviera de impugnar la norma al Tribunal Constitucional.

Concretamente, la nueva ley permitirá al presidente de la Generalitat convocar una consulta popular para pedir la opinión de la ciudadanía sobre cuestiones "políticas de trascendencia especial para la ciudadanía"que son competencia de la administración catalana.

La ponencia de la ley, en la que participaron las formaciones a favor del derecho a decidir, terminó sus trabajos el pasado marzo con tres cambios con respecto al proyecto de ley del Govern de la pasada legislatura, que sirvió de base: la edad de voto baja a los 16 años, se elimina el veto del presidente de la Generalitat y se incluyen otros mecanismos de participación ciudadana como los foros y las encuestas.

Enmiendas a la totalidad

En la sesión parlamentaria de esta semana, la ley se someterá a las enmiendas a la totalidad de PPC y Ciutadans (C's), las dos formaciones contrarias al proceso del derecho a decidir que suman 28 diputados de los 135 del Parlament, lo que hará imposible bloquear el trámite de la normativa.

Así, una vez superada la votación de las enmiendas a la totalidad, se abrirá el periodo de enmiendas parciales y de comparecencias de expertos que servirá para afinar la normativa.

Habitualmente este procedimiento no tarda menos de tres meses, por lo que, teniendo en cuenta el parón veraniego, fuentes parlamentarias estiman que, como muy temprano, se podría aprobar en pleno a principios de octubre.

Los partidos que participaron en la ponencia ya tiene acordadas las enmiendas parciales, por lo que el procedimiento debería ser ágil, aunque la inclusión de otros mecanismos de participación ciudadana que propuso el PSC hará que los grupos tengan que valorar otras propuestas de cambios.