La mayoría cree que nadie ganó el Debate sobre el Estado de la Nación

El líder del PSOE, Pedro Sánchez, se impuso por la mínima al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en el Debate sobre el Estado de la Nación que se celebró esta semana en el Congreso de los Diputados, según el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS). El 21,7% de los encuestados le consideró el vencedor en su debut, por el 21% que respaldó la actuación del jefe del Ejecutivo. A pesar de superar en siete décimas a Rajoy, Sánchez no obtuvo el apoyo mayoritario de los encuestados, pues éstos consideran que ninguno de ellos ganó el debate.

El secretario general de los socialistas consiguió, en su estreno, superar en 7,5 puntos el último registro de su antecesor, Alfredo Pérez Rubalcaba, que obtuvo un 14,2% en el mismo debate el año pasado. Los encuestados consideran que Sánchez conoce mejor los problemas que aquejan a la ciudadanía y muestra más sensibilidad hacia ellos que el Gobierno. A pesar de las buenas percepciones, el líder del PSOE sigue sin ganarse por completo el favor de los suyos y recibe apoyos «prestados» de otras formaciones de izquierdas, mientras que Rajoy consolida su liderazgo al frente de los votantes del Partido Popular.

Los aires de renovación también benefician a Izquierda Unida, que bajo el liderazgo de Alberto Garzón se consolida como tercer líder en el debate y mejora los datos obtenidos por Cayo Lara en 2014. El nuevo portavoz de IU logra, además, ser el político con el que los encuestados manifestaron sentirse más de acuerdo en su discurso.

El enfrentamiento dialéctico que se vivió en el hemiciclo traspasó los muros del Congreso y llegó a los ciudadanos. El 89,3% de los encuestados lo definió como un debate en el que primaron los reproches y las acusaciones sobre las propuestas (4,2%), y lo encontraron bastante conflictivo (43,2%). La falta de medidas concretas apreciadas por los ciudadanos hacen que consideren el Debate sobre el Estado de la Nación como una cita de poco interés (38,1%), de escasa utilidad (43,1%) y que no refleja las verdaderas preocupaciones de los españoles (46,1%).

En cuanto a los temas que se trataron, los encuestados reconocen que la economía dominó las intervenciones, seguida del empleo y la corrupción.

En el capítulo de la ubicación ideológica de los encuestados, este barómetro refleja un crecimiento exponencial de aquéllos que se consideran de extrema izquierda. En 2014, sólo un 5% se encuadraba en esta categoría, por el 11,4% que lo reconoce ahora. Más de seis puntos de incremento, por las ocho décimas que crecen quienes se consideran de extrema derecha.