Valencia

Los «Tigres de Arkan» niegan haber matado y descuartizado a un compatriota

Luka Bojovic, supuesto cabecilla de “Los Tigres de Arkan”, grupo serbio al que se le atribuye la muerte de un compatriota en Madrid, ha negado hoy que ordenara el asesinato, mientras que su lugarteniente, Vladimir Milisavljevic, ha acusado a otro compinche, encarcelado en Serbia, del delito.

Ambos, junto con Sinisa Petric y Vladimir Mijanovic -este último en libertad provisional- han declarado en el juicio que hoy ha comenzado en la Audiencia Nacional contra los cuatro, acusados de asesinar en marzo de 2009 a un compatriota, cuyos restos aparecieron en el río Manzanares con la carne separada de los huesos.

Ninguno ha querido responder a las preguntas de la fiscal, que se ha limitado a leerlas, pero sí a las de la defensa.

Todos ellos han negado participar en los hechos, incluido el supuesto jefe de la banda, Luka Bojovic, quien está considerado el inductor del asesinato en 2003 del que fuera primer ministro serbio Zoran Djindjic, que ejecutó Milisavljevic.

Este último no ha tenido reparo alguno en atribuir el asesinato a Sretko Kalinic, presunto miembro del grupo criminal actualmente en la cárcel en Serbia y de reconocer, a preguntas del abogado, que la forma en la que la víctima fue asesinada y descuartizada era una práctica habitual del hombre al que ha delatado.

Precisamente, el Ministerio Fiscal ha solicitado una comisión rogatoria para que Kalinic comparezca en el juicio o pueda hacerlo por videoconferencia.

Durante el juicio, Bojovic, que ha aprendido español en su estancia en la cárcel, ha negado haber matado a su compatriota y haber dado orden alguna para que otros lo hicieran porque no tenía motivos. Además, ha querido dejar claro que nunca ha tenido poder para dar instrucciones. “Es un invento”, ha enfatizado.

Sin conexiones con el «clan Zemun»

Ha insistido en que nunca ha formado parte de un grupo criminal, ni siquiera de la mafia serbia “Clan Zemun”, que dejó de actuar en 2003 y que fue la sucesora de “Los Tigres de Arkan”, un grupo conocido por su crueldad durante las guerras de los Balcanes.

Bojovic ha asegurado que no había tenido relación alguna con el citado clan, que solo conocía por las informaciones de prensa y de televisión, a la vez que ha precisado que la relación con alguno de los otros acusados, como Mijanovic, era sólo de una amistad que se remonta a la época del colegio.

Ha reconocido formar parte del “Clan Zemun” el presunto lugarteniente de Bojovic, aunque ha afirmado que desde que esta mafia dejó de existir, en 2003, no ha vuelto a formar parte de ninguna organización criminal.

Milisavljevic ha exculpado a Bojovic del asesinato y ha reiterado que fue otro compañero del piso que compartían en Madrid, que ya había cometido otros delitos similares, quien lo hizo.

Los hechos que se juzgan, por los que el fiscal pide penas que oscilan entre los 5 y los 41 años de cárcel, se remontan a marzo de 2009, cuando un compatriota de los acusados y miembro del mismo grupo criminal fue asesinado a martillazos y descuartizado.

Algunos restos, en los que se comprobó que la carne había sido separada de los huesos, aparecieron en el río Manzanares en Madrid. Aún no se ha confirmado si se comieron parte de la carne, como uno de los miembros de la banda dijo que le había relatado en la cárcel en Serbia otro compinche.

Las confesiones

En sus declaraciones policiales, los presuntos asesinos confesaron que separaron la carne de los huesos de la víctima tras asesinarle en un piso de Madrid a base de martillazos y se deshicieron de los restos que no quisieron tirándolos por el inodoro.

Posteriormente, intentaron moler los huesos con una maquina trituradora, que finalmente se atascó, y, ante la imposibilidad de triturar todos los restos, decidieron arrojarlos al río Manzanares.

Bojovic se encuentra en prisión provisional desde su detención en Valencia el 10 de febrero de 2012 junto a Petric y Milisavljevic, mientras que Mijanovic está en libertad desde septiembre de 2012.

En los registros practicados en la vivienda de Bojovic, la Policía halló más de medio millón de euros (660.000 dólares), tres subfusiles de asalto, nueve pistolas semiautomáticas, un llavero pistola, una escopeta, silenciadores, cargadores y numerosa munición.