Urkullu repone la bandera de España en las comisarias de la Ertzaintza

Las banderas españolas retiradas del interior de las comisarías de la Ertzaintza de Erandio, Eibar, Zumárraga y Beasain volvieron a ser colocadas en su lugar tras la polémica originada por una decisión que el Departamento de Seguridad del Gobierno vasco aseguró no haber tomado, aunque no se ha abierto ninguna investigación interna para aclarar de dónde vino la orden de retirada.

La Consejería de Seguridad del nuevo Gobierno vasco sí dio oficialmente la orden de recolocar las banderas y manifestó que cumple la normativa legal establecida en materia de banderas y símbolos, dando marcha atrás en una iniciativa que pretendía dejar las cosas como estaban antes de la llegada de los socialistas a Ajuria Enea. Fue el ex consejero Rodolfo Ares quien decidió colocar la bandera española en el «hall» de entrada de las comisarías, junto con la europea, la ikurriña y la de la Ertzaintza.

La recolocación de las banderas en el sitio en el que habían estado durante la anterior legislatura se produjo después de que el delegado del Gobierno, Carlos Urquijo, enviara una carta a la consejera Estefanía Beltrán de Heredia en la que le requería a la «inmediata reposición» de la bandera de España en todas las dependencias oficiales del Departamento de Seguridad.

El delegado del Gobierno explicaba en la carta que las informaciones sobre la retirada de la bandera española de las sedes de la Ertzaintza atribuían a un «malentendido» la decisión, según un «portavoz» del Departamento vasco de Interior. Urquijo añadía que «para evitar en el futuro la reiteración de actuaciones tan desafortunadas, que no son de recibo entre quienes estamos obligados a cumplir y a hacer cumplir la Ley», cabía recordar que «el artículo tercero de la ley 39/1981, en su apartado primero, establece que la bandera de España deberá ondear en el exterior y ocupar lugar preferente en el interior de todos los edificios y establecimientos de la Administración central, institucional, autonómica, provincial o insular y municipal del Estado».

El PP vasco pidió además una comparecencia parlamentaria de la consejera Beltrán de Heredia. La parlamentaria Nerea Llanos aseguró al presentar esa solicitud de comparecencia que el arranque del PNV al frente de la Consejería de Seguridad «no ha podido ser peor» y consideró que «llama la atención el desgobierno visible en el seno de la Ertzaintza». Criticó Nerea Llanos que «nadie sepa por orden de quién se quitan las banderas» y acusó al PNV de «anteponer la ideología a la gestión». «El PNV –dijo Nerea Llanos– empieza mal su acción de gobierno con actuaciones como ésta, violando la ley de banderas y tratando de instrumentalizar a la Policía vasca, que es de todos, al servicio de sus intereses políticos e ideológicos».