Verstrynge defiende más presión ciudadana contra los políticos

El ex secretario general de Alianza Popular Jorge Verstrynge, que ha sido multado por participar la semana pasada en un escrache, considera que la presión ciudadana y las protestas deben continuar "hasta que la clase política se vea en la obligación de actuar".

Verstrynge estuvo en el escrache que el pasado día 5 protagonizó un grupo de personas frente a la casa de la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, una acción que, según ha explicado, él no organizó, y a la que se limitó a asistir porque quería saber cómo es este tipo de protesta.

Según ha asegurado, comprobó que en los escraches el comportamiento de los ciudadanos es "cívico y normal", y "no hay amenazas de muerte", mientras que la Policía se comporta también, casi siempre, de forma "ejemplar", hasta que recibe "órdenes"y es cuando llegan los "nervios"y se produce el problema.

Verstrynge ha defendido la "virtud"de estas medidas de presión que tratan de dar a conocer un problema como el de los desahucios, señalar a los "políticos"con capacidad para resolverlo y tratar de convencerles para que cambien su voto.

Además ha abogado por que continúen las protestas, y que ya no sean sectoriales por separado, sino unitarias e incluso concentradas en Madrid, que es donde está el Congreso de los Diputados, en lugar de repartidas por las distintas provincias.

La clase política, ha insistido, debería escuchar a su pueblo porque "su propia seguridad viene del pueblo, y cuando el pueblo se enfada no hay seguridad que valga que venga de Bruselas, que por cierto miraría para otro lado".

En este sentido, Jorge Verstrynge ha advertido de que hay un "polvorín social"y una "situación prerrevolucionaria", y si las cosas siguen como están y no cambian antes del verano se avecina un "otoño muy caliente".

Verstrynge ha asegurado sentirse "decepcionado"por declaraciones como las del expresidente del Gobierno Felipe González, quien habló del "sufrimiento"de los niños ante un escrache en el domicilio de sus padres.

"Debe de ser que hay niños que son más niños que otros", ha lamentado el expolítico, sociólogo y politólogo, para quien los "miles de niños"que han sufrido los desahucios son "tan niños como los demás".

El ex secretario general de Alianza Popular va a recurrir la multa de 1.500 euros que tendrá que pagar, una sanción que, ha advertido, si no fuera administrativa -si no la paga le embargan el dinero- se negaría a abonar aunque por ello fuera a la cárcel.

En cualquier caso ha insistido en que seguirá defendiendo las protestas sociales y ha avisado de que si la clase política "no se da prisa"habrá "problemas mayores". Ojalá actuaran "tan deprisa como actuaron para salvar a los bancos", ha añadido.

"Cuando al pueblo se le trata como a un perro termina mordiendo; por ahora no ha mordido, se ha limitado a ladrar aunque cada vez más fuerte", ha insistido el expolítico, para quien "resistir es existir"y hay que seguir llamando la atención de la clase política, que "no quiere entender lo que está pasando".