Independentismo

Un whatsapp demuestra que la Generalitat retrasó de forma consciente la vacunación de Covid de policías y guardias civiles

La AEGC denuncia que se acredita la "política de limpieza" que se pretendía llevar a cabo contra los agentes

Unas 40.000 personas están congregadas en los alrededores de la sede de la consellería de Economía y Hacienda de la Generalitat, situada en la Rambla de Catalunya confluencia con la Gran Vía de Barcelona. Los concentrados protestan por el registro que lleva a cabo la Guardia Civil por orden judicial en la consellería gritando consignas a favor del referéndum del 1 de octubre.
Estado en el quedó un coche oficial d ela Guardia Civil durante la intentona golpista en Cataluña del 1 de octubre de 2017Quique García EFE

Un whatsapp demuestra que fue la Generalitat de Cataluña la que decidió, de forma consciente, retrasar la vacunación de Covid de los policías y guardias civiles destinados en esta comunidad autónoma. Así se ha puesto de manifiesto, según informa la AEGC, a lo largo del proceso judicial que se sigue por este asunto. El ex secretario de Salud Pública acaba de señalar a Alba Vergés, la que fuera consejera de Sanidad de la Generalitat, ahora vicepresidenta del Parlament, como autora de la orden de no vacunar “el Covid en la primera fase de vacunación a los miembros de la Guardia Civil y del Cuerpo Nacional de Policía destinados en Cataluña”, señala la asociación.

Según los whatsapp y mail que ha aportado la defensa del exsecretario fue la actual vicepresidenta del Parlamento “la que decidió que la vida de guardias civiles y policías no valía nada. Tal vez pensó que como somos, a juicio de los independentistas, fuerzas de ocupación ni nuestra vida ni la de nuestras familias merecía el esfuerzo de emplear tiempo en vacunarnos como si se estaba haciendo con otros cuerpos de seguridad catalanes”, agrega.

“Esta orden dada por Alba Vergés no se produjo hace cuatro días, la dio en el peor momento de la pandemia sabiendo que ponía en riesgo la vida de unos trabajadores públicos”. “La exconsejera sabía que esta vacunación era importante por eso si había vacunado a más de un 70% de otros cuerpos policiales catalanes”.

Subraya que los whatsapp que ahora ha puesto a disposición judicial el ex secretario de salud pública “no solo sirven para conocer la X que estaba detrás de la orden de no vacunarnos, sino conocer la “política de limpieza” que se pretendía llevar a cabo desde la Consejería de Sanidad, de ciudadanos de primera con derecho a todo y los que no llegábamos ni a regional condenados a enfermar y a hacer de cobayas con nuestras familias a las que cada día poníamos en riesgo”.

“Estas órdenes nos dan la razón: en la España de la pandemia mientras unos nos arriesgábamos por seguir sirviendo a nuestro país y a sus ciudadanos, otros, desde sus despachos iban más lejos y dictaban órdenes discriminatorias siendo conscientes que además ponían en riesgo vidas. Ahora a los guardias civiles que denunciamos estos hechos solo nos cabe esperar que la justicia haga su trabajo”, trabajo”, concluye.