Siria

Javier Saavedra: «El ventilador puede volverse contra uno»

Profesión: abogado.. Nació: en 1948, en Ourense.. Por qué está aquí: defiende a Robert Cockx, supuesto fiduciario en el extranjero de Urdangarín.

Javier Saavedra
Javier Saavedralarazon

–El famoso abogado de los famosos. ¿Es bueno o malo que un abogado sea tan popular como sus representados?

–Ni bueno ni malo, sino todo lo contrario; irremediable.

–¿A qué famoso/a no volverá a defender?

–No lo puedo decir. Serían varios y varias, como diría ZP.

–La Pantoja le dejó tirado en el «caso Malaya»...

–No me dejó. Había divergencia de intereses: yo defendía a Julián Muñoz.

–¿Acabará cantando «Ay, pena, penita, pena» en la trena?

–Espero y deseo oírle cantar ésa y otras en un teatro.

–¿Y qué me dice de Julián?

–Tengo el convencimiento de que saldrá absuelto.

–Dijo alguien que la justicia es una tela de araña que permite el paso de los moscones y atrapa a los mosquitos...

–Nunca negaría esa definición.

–¿Defendería gratis a un desahuciado?

–Sí. Pero hay que distinguir entre el necesitado y el aprovechado.

–Me imagino que los tiempos de corrupción son buenos para los bufetes.

–No lo crea: cobrar es casi misión imposible. El dinero de los corruptos está muy bien escondido.

–¿Y a quién le placería defender ahora mismo?

–Ante los tribunales, al presidente de Siria, Al Asad.

–Defendió a Sadam Husein. Parece que le van los malos...

–Voy con los buenos y defiendo a los malos. Me van los retos.

–¿Mira los floreros de los restaurantes antes de hablar?

–Siempre. Es lo primero que hago.

–¿Diego Torres se está defendiendo bien o...?

–Nunca aconsejaría emplear secretos, intimidades, para obtener beneficios. La táctica del ventilador puede volverse contra uno mismo.

–Y el aire acondicionado contra las gargantas sensibles...