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Penélope Cruz, una actriz “progre” vigilada por los espías cubanos

La actriz española señaló que es difícil que alguien se relaja en la isla y pueda hablar sobre lo que siente

Penélope Cruz en “La red avispa”
Penélope Cruz en “La red avispa”larazon

La futura presencia de Penélope Cruz en tierras cubanas se ha convertido en “non grata” para la policía secreta de la isla, la temida G2

Aunque se intenta tapar la situación por cuestiones obvias, la futura presencia de Penélope Cruz en tierras cubanas se ha convertido en “non grata” para la policía secreta de la isla, la temida G2, el principal organismo estatal de inteligencia del Gobierno castrista. La actriz rodó su última película, “La red avispa”, en la isla caribeña, y el director de la misma, Oliver Assayas, reconoce que se sintieron “vigilados” por los servicios de inteligencia. Y aclara que “al principio no nos dejaban rodar allí, pero el no se convirtió en sí. Pero, siempre sentimos que nos estaban observando y era muy cuidadosos con lo que hacíamos, de vez en cuando trataban de controlarnos...”

Sin embargo, días más tarde, Pe manifestó en Estados Unidos, durante la fiesta de presentación de la cinta en el New York Film Festival, que “no me sentí perseguida durante el rodaje, aunque me llamó la atención que es difícil que alguien se relaje allí y pueda hablar sobre lo que siente, o sea, una real libertad de expresión. Todavía es complicado que la gente pueda estar tranquila a la hora de hablar”. Estas declaraciones realizadas por la española al periodista latino Mario Vallejo, según nos desvela M.J. , un exiliado cubano residente entre Miami y Madrid vinculado a los círculos anticastristas, “al G2 le cayeron como una losa viniendo de quien vienen, una actriz internacional ganadora de un Oscar, lo que representa una gran repercusión mundial. Naturalmente que Penélope Cruz y Assayas se pongan del lado aperturista más democrático y en contra del sector más peligroso del Gobierno cubano molesta muchísimo a la “secreta” de Raúl Castro y su pandilla. Lo que ha comentado Cruz es la pura realidad. Quedan muchos años por delante para que Cuba recupere la libertad. En este sentido, no extraña que ambos sean consideradas personas non gratas por una policía que quiere controlar al máximo a residentes y no residentes en la isla.”

Penélope calla, prefiere no entrar en enfrentamientos innecesarios y guarda silencio. Bastante le ha caído encima con las críticas recibidas por una película cargada de polémicas por el tema que trata, la historia de cinco espías miembros de los servicios de Inteligencia cubana, arrestados en Florida en 1998 acusados de los delitos de espionaje, conspiración y otras actividades ilegales en Estados Unidos. Y Cruz interpreta a la esposa de uno de ellos. A juicio de las asociaciones anticastristas, el filme muestra “una versión parcial de lo ocurrido realmente, parece una historia para glorificar criminales, y coincide con la postura del Gobierno castrista que los considera héroes antiterroristas e ignora las consecuencias de sus acciones, como el derribo de varias avionetas de “Hermanos al rescate”, que ayudan a balseros que escapan de la isla y se encuentran en alta mar”.

La prestigiosa escritora exiliada cubana, nacionalizada española, Zoé Valdés ha declarado que “es una cinta de propaganda relacionada con el castrocomunismo y con una de sus peores acciones en contra de los derechos humanos y de la libertad...” y aboga porque “hay que boicotearlo”. En lo que se refiere a Vallejo, en nombre de la comunidad cubana exiliada en Miami, preguntó a Penélope si conocía la historia real de la red Avispa, “que asesinaron a cuatro pilotos que intentaban rescatar a balseros”, a lo que Cruz contestó que “no necesito pensar como mi personaje, o tener que justificar las cosas que hicieron ella y su marido”, lo que fue considerado en los medios afines al exilio cubano en tierras estadounidenses como “una huida hacia adelante para evitarse problemas”. Pero, como se indica al principio de este texto, la percepción de la actriz en el sentido de la falta de libertad de expresión en la isla puede que le pase factura si pretende regresar a ella en el futuro.