Las escopetas de «Mou»

La prueba de La Romareda también la pasó el Real Madrid con éxito. El equipo de Mourinho cazó los tres puntos a orillas del Ebro con suma facilidad porque el Zaragoza de Javier Aguirre, colista de la clasificación, está a años luz de los madridistas. Y como el técnico portugués está empeñado en que el equipo sea líder en Navidad, con permiso del Barça que tendrá que tropezar en Cornellá, lo de ayer fue casi un paseo militar, con goles, uno de ellos de Cristiano, Pichichi del campeonato; buen juego a rafagas, y pocas complicaciones defensivas, aunque Casillas encajó un tanto de penalti. Fue sencillo ganar porque el rival anda bajo mínimos y Mourinho, además, es el soberano de la practicidad y con todo resuelto decidió que era hora de que Benzema le diera unos minutos a Granero. El francés, que está en boca de todos, peleó, trabajó, pero le faltó concretar y se marcó un partido gris por lo que habrá que pedirle a Jorge Valdano un perro que olfatee mejor el área rival.
Para el Madrid examen, pues, sencillo y a pensar en el Sevilla, próximo rival en el Bernabéu, mirando por el rabillo del ojo, como el bueno de Andújar, lo que pasa por allí arriba.Y en Barcelona, de momento, todo marcha según el guión escrito por Guardiola. Tranquilidad, triunfos y el convencimiento de que el Espanyol, derrotado ayer en San Mamés, puede complicarles la vida.