Prima de riesgo
La inyección del BCE abarata un 288% la financiación del Estado a corto plazo
El mercado cumplió ayer con el Estado, que logró reducir el interés ofrecido a los inversores, en su mayoría extranjeros, en la subasta de deuda a corto plazo. La compra de bonos italianos y españoles por parte del BCE inyectó tranquilidad en el secundario, lo que se tradujo en el éxito de una emisión que cubre las necesidades más inmediatas de financiación de España.
En concreto, el Tesoro colocó 2.941 millones de euros en Letras a tres y seis meses –el 98% del volumen previsto, 3.000 millones– con una demanda conjunta de 13.826 millones, lo que supone multiplicar por 4,7 la oferta.
La mayor demanda en relación con el capital adjudicado se produjo en el caso de las Letras a tres meses, con peticiones por valor de 6.133 millones de euros, 7,6 veces la colocación final de 805 millones. El interés ofrecido fue del 1,388%, un 28,8% menos que el abonado en la última subasta al mismo plazo –1,95% el pasado mes de julio–.
En el caso de las Letras a seis meses, el capital adjudicado alcanzó los 2.135 millones, para una demanda de 7.692 millones (3,6 veces la oferta) y el interés abonado –2,65%– se redujo en un 16,26%. La próxima cita del Tesoro con los inversores se producirá el 1 de septiembre, con una emisión de obligaciones a cinco años.
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