Un semanario satírico francés vuelve a caricaturizar a Mahoma

PARÍS- Aceite sobre fuego. En plena escalada de violencia en el mundo musulmán contra el vídeo antiislámico que circula desde hace unos días, el semanario satírico francés «Charlie Hebdo» sale hoy a la calle con nuevas caricaturas de Mahoma que podrían exacerbar la actual tensión.

En su portada, la publicación representa a un judío ortodoxo empujando a un imán en una silla de ruedas parodiando bajo el título «Intocables 2», en alusión al éxito cinematográfico del año en Francia. «No se rían», se lee en un bocadillo. Sin embargo, las viñetas más controvertidas plasman en páginas interiores al profeta desnudo o en posiciones que podrían resultar ofensivas para la comunidad musulmana.

El Gobierno francés se mostró ayer «inquieto» por las consecuencias que podría tener la publicación de estas caricaturas. Subrayando que la libertad de expresión es «un principio fundamental de la República», el primer ministro galo, Jean Marc Ayrault, manifestó en un comunicado «su desaprobación frente a todo exceso» en el contexto actual y llamó «al espíritu de responsabilidad de cada uno».

En 2006, «Charlie Hebdo» publicó unas caricaturas del profeta Mahoma en un número especial que registró récord de ventas. Sin embargo, hubo consecuencias negativas, dada la supuesta afrenta que representa para las personas de creencias islámicas. Anteriormente, el diario danés «Jyllands Posten» había publicado unas viñetas que desencadenaron una ola diplomática de protestas, aunque encontró respaldo en otros medios que siguieron la misma línea, como el noruego «Magazinet», el alemán «Die Welt» y el francés «France Soir».

Años después, el semanario fue víctima a finales de 2011 de un incendio criminal en sus locales la víspera de la publicación de un número especial sobre la «Sharia» (ley islámica) que no causó ningún herido.

El director de la revista, Stéphane Charbonnier, conocido como Charb, ha defendido el derecho de la publicación a mostrar las caricaturas y aseguró que, si se autocensuran, «el puñado de extremistas que se revuelven en el mundo y en Francia habría ganado». Charbonnier vive bajo protección policial desde el atentado que sufrió la sede del semanario.

Tras recibir ayer el Ministerio del Interior el nuevo número de la revista satírica, la Prefectura de Policía de París decretó un aumento de las medidas de seguridad en torno a las oficinas de la publicación, según informa la emisora RTL.

«Dibujos insultantes para el islam»
El presidente del Consejo Francés del culto musulmán, Mohamed Moussaoui, está «profundamente consternado» con las nuevas viñetas de Mahoma, que no son más que «dibujos insultantes para el profeta del islam».
El órgano representativo de las diferentes corrientes del islam en Francia condena «con el mayor vigor este nuevo acto islamófobo que ofende deliberadamente los sentimientos de los musulmanes». El Consejo del culto musulmán expresa, además, «su profunda inquietud frente a este acto irresponsable que, en un contexto muy tenso, tiene el riesgo de exacerbar las tensiones y de provocar reacciones perjudiciales». «Nada puede justificar el insulto ni la incitación al odio», añade.