Blanqueo de capitales

La Pantoja se lía y la lía

Susanna Griso ha vivido involuntariamente los dos días más surrealistas –cercanos a la astracanada– al frente de «Espejo público». Claro que no contaba con la personalidad torrencial y apasionada de Isabel Pantoja, que casi le cuesta un pleito, otro más, en este caso con Telecinco.

La Pantoja se lía y la lía
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El pasado jueves, Susanna Griso no podía dar crédito a lo que estaba a punto de ocurrir. En cuestión de segundos, logró lo que toda la profesión periodística desea, y por lo que Telecinco le ha hecho a la artista un contrato en exclusiva por valor de cerca de un millón y medio de euros: una entrevista con Isabel Pantoja.

En el último bloque del programa se estaba debatiendo sobre la corrupción con la presencia de Cristóbal Toro, autor de «El saqueo de Marbella». En un momento dado salió el nombre de Isabel Pantoja y ésta entró a los pocos minutos para ejercer su derecho a réplica. No contenta con esos minutos –se amplió la duración de «Espejo público» para oír su testimonio– Griso le dio la posibilidad de grabar una entrevista que se emitiría en los próximos días. Isabel Pantoja aceptó y concedió una entrevista de 50 minutos, que la propia Griso tuvo que poner fin –la cantante estaba dispuesta a alargarla hasta el infinito– porque tenían que dejar el plató libre.

Pocas horas después llegaba a Antena 3 un burofax del abogado de Pantoja en el que se «prohibía» a la cadena emitir la entrevista, ya que, según ella, se produjo sin su consentimiento. Se acogía a su contrato en exclusividad con Telecinco que le impedía intervenir en otras cadenas. Este argumento se cae por sí sólo si se tiene en cuenta que participó en el programa horas antes.

Hoy, durante la emisión de «Espejo Público», Susanna Griso ha puesto los puntos sobre las íes: «Puedo respetar que Isabel Pantoja piense que fue una locura haber contado cosas que a otra cadena le ha prohibido por contrato, pero que no diga que no sabía que estaba siendo grabada. Nunca he grabado a nadie sin que lo sepa y no lo haré jamás», afirmó. Eso sí, por deferencia a Isabel Pantoja, en un gesto de elegancia y de coherencia, los responsables de «Espejo público» decidieron no emitirla, aunque legalmente nadie podía impedirlo. Fue una decisión unilateral de Antena 3. Durante el transcurso del programa el colaborador de LA RAZÓN, Jesús Mariñas, afirmó: «Somos la cadena seria, no lo que ellos dicen y por eso no lo emitimos».

Sea como fuere, Isabel Pantoja dejó en una posición delicada a Telecinco, cuyos directivos veían que su fichaje estrella hablaba gratis para otra cadena vía telefónica. Lo que queda es preguntarse es qué le pasó a Isabel Pantoja y porque decidió hablar, y dejarse entrevistar, por «Espejo público».