Grecia

El déficit que nos mata por Fernando Navarrete

 

La Razón
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El Gobierno ha vuelto a anunciar nuevos ajustes presupuestarios para limitar un déficit público que previamente había desbocado con una política económica suicida. La reducción del gasto público debe ser una prioridad política. Desde 2003 el gasto público en España ha aumentado más de un 60%. En este aquelarre despilfarrador las ineficiencias, duplicidades, los simples lujos, las redes clientelares y los caprichos ideológicos campan a sus anchas por el presupuesto. En este contexto, llama la atención que los ajustes propuestos carezcan de todo análisis sobre la eficiencia del gasto y sean de una tosquedad más propia de Grecia, de la Argentina previa al corralito o de un Gobierno recién llegado. Quizás es que sólo llevan seis años mandando y no gobernando, lo cual explicaría además cómo hemos podido llegar hasta aquí. Lo peor es que estos recortes no atacan la raíz del problema de insostenibilidad de las cuentas públicas. El Gobierno y la sociedad deben saber que las tensiones en los mercados financieros no cesarán hasta que el Gobierno no reduzca estructuralmente sus niveles de gasto, reforme los incentivos en la provisión de servicios públicos, racionalice la asignación de competencias y, sobre todo, hasta que no genere unas condiciones que permitan una masiva generación de empleo.

Fernando Navarrete. Director general de FAES