Castilla y León a la cabeza en inversión en los Presupuestos

VALLADOLID- Castilla y León recibirá el próximo año 1.587,11 millones de euros en inversiones reales del Estado, lo que la convierte en la segunda autonomía que mayor cantidad acaparará de las cuentas nacionales tras Andalucía. Así se desprende del proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2013.

A pesar de que se tratan de unas cuentas austeras, la inversión para Castilla y León crece en un 0,14 por ciento en relación a este año al subir en algo más de dos millones de euros siendo, de nuevo, los dos ministerios más inversores en la Comunidad el de Fomento y el de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente.

El Ministerio de Fomento dedicará a Castilla y León 431 millones, con más de 200 millones destinados a construcción de carreteras, sobre todo las Autovías León-Valladolid, la de Navarra, Burgos-Aguilar y la de Castilla. La Autovía del Duero vuelve a ser la gran olvidada.
Por lo que respecta al Ministerio de Medio Ambiente, el proyecto reserva 69,15 millones y aquí destacan las infraestructuras de regadío, con la II fase del Canal Bajo de Payuelos a la cabeza, el arreglo de los canales del Páramo y distintas actuaciones de ampliación y mejora de estaciones de depuración.

Frente a estos incrementos, Castilla y León verá reducidos en un 32,7 por ciento los ingresos del Fondo de Suficiencia Global que establece el Sistema de Financiación Autonómica y que pasan de 708 millones a 477.

En cuanto a las entidades del sector público estatal y fundacional, la inversión en la Comunidad se contrae ligeramente, un 0,26 por ciento, con 1.037 millones, por debajo de los 1.040 de 2012. En materia de ferrocarriles, el Grupo Fomento realizará un fuerte esfuerzo inversor en las líneas de alta velocidad a Galicia, León y el País Vasco; mientras la Fundación Ciudad de la Energía (Ciuden), con sede en la localidad berciana de Ponferrada, recibirá casi 41 millones de euros, más de la mitad para la construcción de la sede central del Museo Nacional de la Energía.

Por su parte, Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA) asignará apenas 800.000 euros a los cuatro aeropuertos de la Comunidad, y más de la mitad la recibirá el aeropuerto de Villanubla, en Valladolid. En concreto, 445.000 euros, 187.000 para inversiones de apoyo y mantenimiento; 125.000, para actuaciones en pavimentos; 115.000, para acometidas eléctricas, y 18.000, para la adecuación del campo de vuelos.

Una vez conocidas las cuentas de la Comunidad, la consejera de Hacienda, Pilar del Olmo aseguró que las inversiones consignadas «traerán riqueza y empleo» en 2013 para Castilla y León y mostró su satisfacción por que «frente a una caída generalizada de las inversiones territoriales de más de un 16 por ciento», en la Comunidad ésta «se mantiene e incluso crece un poco».

Del Olmo valoró como «lo más importante» el hecho de que España no vaya a necesitar en 2013 ««recursos adicionales procedentes del exterior por primera vez desde que empezó la crisis», es decir, «no vaya a necesitar esa financiación externa» sobre todo en el sector privado.

Para la consejera de Hacienda, las cuentas son «sociales» ya que «exigen un esfuerzo ponderado a todos los ciudadanos para que la crisis no recaiga en aquellos que menos tienen». En su opinión existe además «un reparto» entre «un ajuste del gasto público» y «algunas nuevas figuras impositivas».

El PSOE los tacha de «pésimos»
El secretario de Política Económica del PSOE de Castilla y León, Julio López, criticó con dureza el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2013 al estimar que se trata de unas cuentas «pésimas y de la usura». López lamenta que la consejera de Hacienda hable de «presupuestos sociales», una valoración que, a su juicio, no se merecen los ciudadanos «porque es un sarcasmo. Por ello, le recomendó que «tenga la decencia, al menos, de no reírse de la inteligencia de los ciudadanos porque debe decir las cosas como son». Por su parte, el coordinador regional de Izquierda Unida, José María González, criticó el proyecto al considerar que provocará una pérdida de 50.000 empleos en Castilla y León a lo largo del año que viene que se sumarán a los 300.000 que acumulará la Región a final de éste.