Novela

El «caso Kampusch» no tiene fin por Francisco Pérez Abellán

El caso de Natascha Kampusch, que fue secuestrada cuando sólo tenía diez años y que estuvo ocho en poder de sus captores, sigue estando enmarañado. Ahora resulta todavía más polémico desde el momento en el que descubrieron que el policía más entregado al caso fue hallado extrañamente muerto.

La Razón
La RazónLa Razón

En teoría se había suicidado disparándose en la sien izquierda. Cualquiera que lleva un arma sabe que esto es muy inseguro y que puede dejarte como un vegetal sin matarte. Un policía que quiera quitarse la vida se mete el cañón en la boca por regla general. Pero el asunto es que el agente Kroll que, en julio de 2010 estaba investigando el caso, aunque le habían ordenado que lo dejara, era diestro y es un poco raro que alguien así se dispare en la sien izquierda. Al saber esto los que difundieron la especie del suicidio replicaron que se había disparado ayudándose con las dos manos. No lo intenten en casa.

Lo que se investiga ahora es si el «caso Natascha» está relacionado con las mafias de pederastia internacional. La cantidad de cosas extrañas de este secuestro es tal que Johann Rzeszut, que fuera presidente del Tribunal Supremo, ha realizado un informe de medio centenar de páginas para que se reabra la investigación. Este informe ha llegado al Parlamento austriaco y propone averiguar si el presunto autor, Priklopil, estaba en relación con redes pedófilas.

Natascha Kampusch es la víctima, raptada por los criminales y con derecho a guardar su intimidad. Pero también es el producto de haber crecido bajo la opresión de un secuestro. Cuando fue liberada, no sólo no dijo lo que había pasado, ni mucho menos toda la verdad, sino que empezó a hacer cosas extrañas, según dijo su padre, llamar más de cien veces al único amigo de su presunto secuestrador. Alguna de esas comunicaciones duraron varias horas. ¿Qué sabía el amigo de Priklopil? ¿Qué relación tuvo con Natascha, la chica que creció teniendo como Pigmalión al criminal que se la había llevado?

Natascha ha ganado dinero con sus comparecencias públicas en los periódicos y la televisión y se compró la casa en la que vivió su secuestro. Con este extravagante comportamiento, crecen los rumores de mar de fondo en esta historia que no explica por qué si no vivía en el sótano, y estaba más o menos libre para andar por la casa, no se escapó antes.

Si el policía diestro se ha metido un pistoletazo como si fuera tonto y como si fuera zurdo es porque detrás hay gente poderosa que hace su agosto. Los niños, la pederastia es un mercado en alza.

Priklopil también se suicidó de forma tal que da para pensar que lo quitaron de en medio. Las fotos de su cadáver no dejan ver las heridas que deberían tener un cuerpo que se arrojó a un tren que le cortó la cabeza. Podría haber sido asesinado antes y arrojado al tren después. El empleado ferroviario que halló el cadáver no fue nunca interrogado.

Mientras, se va filtrando que Kampusch fue vista en varias ocasiones en el exterior de la vivienda, que salía con Priklopil a pasear en coche varias veces a la semana. La Policía añade que estuvieron de excursión varias veces, incluso en la nieve.

Los implicados que hablan no dicen todo lo que saben y los «polis» no tienen herramientas para lograr la confesión. De seguir así, el futuro estará poblado de intrigas y de niños desaparecidos.