Estocolmo

Comienza la «fiesta de Vargas»

Vargas Llosa no piensa dejarse enterrar porque le hayan dado el Nobel. Durante su primer día en Estocolmo, el escritor anunció que continuará con sus «anhelos y proyectos» sin que el galardón, que recogerá el viernes en Estocolmo haya trastocado un ápice su tarea de fabulador y cronista de su tiempo.

Vargas Llosa: «No me voy a dejar enterrar por el Nobel»
Vargas Llosa: «No me voy a dejar enterrar por el Nobel»larazon

«No me voy a convertir en una estatua», dijo el autor tras declararse feliz ante los medios. En esta comparecencia en la Academia sueca, que hoy albergará en su gran sala el discurso de recepción del Nobel de Literatura, el escritor, acompañado por su esposa, Patricia, apareció con un semblante serio, hasta el punto de que un periodista peruano le solicitó «una sonrisa a don Mario», informa Efe.

Legalización de las drogas
Más distendido, el autor de «La fiesta del chivo», vestido con un traje oscuro y camisa rosa, conversó tanto de literatura como de la coyuntura política y social internacional: en su opinión, la función más importante de la literatura es «enriquecer nuestras experiencias con historias imaginarias que den mayor profundidad a nuestras ideas, enriquezcan nuestra sensibilidad y aumenten nuestra desasosiego y actitud critica frente al mundo». El autor de «La tía Julia y el escribidor», que en el mundo de la fábula no quiere «dar mensajes y sí contar historias», es bien conocido por su compromiso político. «Soy liberal, alguien que cree en la democracia, en la libertad, en contra de toda forma de autoritarismo y totalitarismo», subrayó. Además, ofreció una respuesta clara a los problemas del narcotráfico en México, y se mostró partidario de «descriminalizar las drogas» en ese país e invertir el dinero de la lucha contra esa lacra en planes de curación y prevención. «La idea de la legalización poco a poco ha ido abriéndose paso», dijo el también Premio Cervantes. Asimismo, aseguró que tiene una opinión contradictoria sobre las filtraciones de Wikileaks: «Por una parte, me parece formidable que todo salga a la luz. Por otra, no sé cómo podría funcionar un Estado si desaparece la privacidad».

Al volver la mirada a su país, parte de cuya historia queda reflejada en «El sueño del celta», el autor se preguntó por qué los peruanos no han sido capaces de «desagraviar a los indígenas por las atrocidades cometidas en la época de auge de la explotaciones de caucho». No obstante, el escritor está convencido de que «Perú vive una democracia, aunque ésta sea imperfecta. Nos ha traído convivencia en la paz. Las secuelas de la dictadura poco a poco van desapareciendo, y mi esperanza es que esa democracia se refuerce», añadió el escritor, que también analizó asuntos como la revolución audiovisual, la banalización de la cultura y la igualdad entre hombres y mujeres. En definitiva, un preludio perfecto para las palabras que pronunciará hoy en su discurso.