Barcelona
La Barcelona World Race para el Virbac-Paprec 3
Jean-Pierre Dick repite triunfo, esta vez junto a Loïck Peyron, tras 93 días de navegar en condiciones extremas.
BARCELONA- El nombre de Jean-Pierre Dick estará siempre ligado al de la Barcelona World Race (BWR). Vencedor de la primera edición, el navegante francés se impuso ayer de nuevo cuando cruzó la línea de meta, situada enfrente del Hotel W, a las 12.20 de la mañana a bordo del Virbac-Paprec 3. A su lado, eufórico, su compañero en esta vuelta al mundo a dos, el también galo Loïck Peyron, que inscribe su nombre por primera vez en la BWR, un título más en una exitosa carrera en el mundo de la vela.
El segundo puesto será para el IMOCA Open 60 «Mapfre», con Iker Martínez y Xabier Fernández de patrones. El barco español se encontraba ayer a 260 kilómetros de Barcelona y tiene previsto llegar a la meta antes de las tres de la tarde. Será una llegada casi heroica, ya que una llamada de Martínez a su equipo de tierra desveló que la embarcación se había quedado sin alimentos y sin combustible. «No tenemos gasoil ni para encender el motor. Estamos a cero de alimentos, espero que cuando crucemos la línea de meta nos puedan traer algo de comida y gasoil», les transmitió.
La avanzada tecnología de la embarcación campeona ha sido la clave de su triunfo. El Virbac-Paprec 3 es un barco de última generación. Fue acabado de construir en los astilleros Cookson de Nueva Zelanda en 2010, y es un 15 por ciento más ligero que su predecesor, el Virbac-Paprec 2, campeón de la primera edición de la Barcelona World Race. Es la unidad más extrema de su clase jamás construida, lo que le ha permitido avanzar más rápido con menos velas y mantenerlas más tiempo, por lo que el patrón puede reservarse más físicamente al tener que hacer menos maniobras. Su principal competidor, el «Mapfre», por ejemplo, fue construido en Francia y botado en mayo de 2007 en Port La Fôret, por lo que se le considera de penúltima generación.
Los campeones cruzaron la línea de meta 93 días, 22 horas, 20 minutos y 36 segundos después de su salida del mismo puerto de Barcelona. «Ha sido una regata más dura que la anterior, pero esperamos volver», comentaron Dick y Peyron a su llegada. El acto fue de lo más festivo y el alcalde, Jordi Hereu, fue uno de los primeros en darles la bienvenida. «Son dos grandes héroes», comentó el edil, que les invitó a participar en la tecera edición de la BWR.
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