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Cataluña acumula casi un tercio del agujero autonómico

 Las comunidades autónomas no están contribuyendo precisamente a la contención de la deuda. Aunque es el Estado central el que acumula más pasivo, lo que resulta lógico de acuerdo a sus dimensiones, la deuda autonómica creció un 17% en 2011 y es directamente culpable del pésimo balance con el que se cerró el pasado año.

La Razón
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El agujero autonómico supone el 13,1% del PIB, otro máximo histórico que supone más del doble del computado cuando empezó a calcularse el dato hace 17 años. Por entonces, rozaba el 6%, una cifra en la que se mantuvo hasta el año del comienzo de la crisis, ya que en 2008, el agujero de las comunidades autónomas apenas superaba el 6,7% del PIB.

De entre todas las comunidades, destaca el caso de Cataluña. Es la que más debe, se mire por donde se mire: en términos absolutos, nada menos que 41.778 millones de euros, y en proporción a su PIB, el 20,7%, con lo que supera a la hasta ahora líder, la Comunidad Valenciana. Con estas cifras, los catalanes ya concentran el 30% de la deuda pública de todas las autonomías, según los datos del Banco de España. La deuda pública de Cataluña creció un 22,05% en 2011 en relación a 2010, muy por encima del 17,3% de media de todas las comunidades, que adeudan 140.083 millones de euros.

La segunda más endeudada, la Comunidad Valenciana, logra abandonar la primera posición de morosidad autonómica después de haber conseguido contener al 9,49% el aumento interanual de su deuda. Pese a todo, acumula un endeudamiento que equivale el 19,9 por ciento de su PIB. Porcentualmente, le sigue Castilla-La Mancha, con una deuda que supone el 18% de sus ingresos y un aumento anual del 13,2%, muy por debajo de la media autonómica.

De entre las que más vieron aumentar su deuda en el transcurso del pasado año destacan Navarra, que lideró la subida con un 44,56%, Murcia (33,18%), Cantabria (30,34%), Castilla y León (27,23%) y Asturias (26,69%). Junto con la Comunidad Valenciana, el menor crecimiento lo registraron Baleares (7,18%) y el País Vasco (10,39%).Capítulo aparte merece la Comunidad de Madrid, la que tiene la deuda más baja (un 7,9% del PIB) y donde menos se ha incrementado en 2011 y en los últimos nueve años. Según la autonomía madrileña, es además la que registra un menor endeudamiento en relación a su PIB, ya que se sitúa en el 7,9% –5,2 puntos por debajo de la media (13,1%)– y casi tres veces menos que la de Cataluña que, con un 20,7%, tiene una deuda 26.331 millones mayor que la de Madrid. Castilla La Mancha ha incrementado su deuda un 716% (10 veces más que la Comunidad de Madrid), Cataluña lo ha hecho un 282,6% y el País Vasco un 269,5% (ambas, casi cuatro veces más que Madrid).

Por último, las administraciones locales son las únicas que arrojaron algo de esperanza y lograron reducir ligeramente su endeudamiento a 35.420 millones de euros (un 0,03 % menos respecto a 2010). La deuda de las corporaciones locales representa el 3,3 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB), un porcentaje que se mantiene estable desde 2009.