Duvalier en libertad acusado de corrupción y robo por la Fiscalía

El ex dictador haitiano Jean-Claude Duvalier salió ayer de la Fiscalía de Puerto Príncipe tras prestar declaración durante más de cuatro horas y ser acusado de desvío de capitales, según fuentes judiciales. Entre otros delitos, la Fiscalía imputó a «Baby Doc» por los delitos de corrupción, robo y apropiación indebida de fondos públicos, que habría cometido durante su régimen (1971-1986).

El fiscal jefe de la capital haitiana, Aristidas Auguste, declaró que «su destino está ahora en manos del juez instructor». «Hemos entregado los cargos contra él», agregó, en declaraciones a la agencia Reuters.

A disposición de la Justicia
Duvalier, quien abandonó la Fiscalía acompañado por agentes de la Policía, pero sin esposas, quedó a disposición de la Justicia haitiana, según sus abogados, que no informaron sobre el destino al que será conducido, aunque se presume que a su hotel.

El ex dictador, que llegó por sorpresa a Haití el domingo tras 25 años de exilio en Francia, fue conducido a la sede del Ministerio Público a primeras horas de la tarde desde su hotel, donde por la mañana comenzó a ser interrogado por el fiscal.

Grupos de seguidores permanecieron en los alrededores de la Fiscalía para dar a poyo al ex gobernante, en espera de la resolución judicial, mientras que activistas de los derechos humanos se congregaron a las puertas de la institución, donde denunciaron los crímenes de los que se acusa.

Entre los presentes estaba la responsable del organismo «Droits et democratie» (Derechos y Democracia), Daniele Magloire, ex integrante del Consejo de los Sabios de Haití, quien mostró su sorpresa por la falta de información acerca del procedimiento judicial abierto y de las etapas que seguirán.

El director ejecutivo de la red Nacional de Defensa de Derechos Humanos (RNDDH), dijo a la agencia Efe que «Duvalier fue el cabecilla de muchos crímenes que se cometieron entre 1971 y 1986, que se pueden calificar de crímenes contra la Humanidad». Según él, entre estos crímenes figuran «la tortura, la detención arbitraria, el asesinato y la ejecución sumaria. Son crímenes que no prescriben», aseveró.

Jean Claude Duvalier, también llamado «Baby Doc», gobernó entre 1971 y 1986 como sucesor de su padre, François Duvalier, quien lo había hecho desde 1957. La familia Duvalier lideró un régimen al que se considera responsable de numerosos crímenes y del desvío de sumas millonarias pertenecientes a los fondos del Estado.

En 1987 fue juzgado ante un tribunal por una demanda civil por el presunto desvío en provecho propio de 120 millones de dólares de fondos del Estado, y en 1991 se presentó otra demanda por el supuesto robo de 800 millones que, al parecer, tenía en distintos bancos de Estados Unidos, Suiza y Francia.

Bajo la sombra del padre
- Toma de poder. El 2 de enero de 1971, François Duvalier, «Papa Doc», enmendó la Constitución para nombrar a su hijo sucesor. Cuatro meses después, el dictador caribeño falleció y su hijo, «Baby Doc», con 19 años, se convirtió en el tirano más joven del mundo.
- Tímida apertura. La infancia de Jean-Claude estuvo marcada por las intrigas políticas y la violencia selectiva. A los once años escapó de un atentado. En su mandato terminó con las ejecuciones sumarísimas y las desapariciones aleatorias, pero más allá de eso no introdujo cambios profundos en un régimen de naturaleza represiva.
- Protesta popular y exilio. En 1986 se vio obligado a abandonar el país en medio de una gran protesta. Encontró refugio en Francia. En 1991 se barajó la solicitud de extradición. Su regreso a Haití en 2005 se frustró por una amenaza de arresto.