Cada año se vierten 635000 toneladas de petróleo al Mediterráneo

Sin embargo, esta organización alerta de que dos tercios de la contaminación que llega al mar tiene su origen en tierra.

Ante el vertido de crudo de Repsol en el delta del Ebro, los ecologistas han exigido de forma unánime una moratoria a la construcción de nuevos pozos petrolíferos en el Mediterráneo.

Así, Oceana ha solicitado a la Unión Europea que prohíba perforar nuevos pozos y que establezca "fuertes medidas de control"para los ya existentes. Según esta ONG, ésta "no es la única fuga ocurrida en la zona", y asegura que ya tuvieron lugar dos en mayo y junio de 2009, en los pozos de Lubina y Montanazo.

Greenpeace también ha aprovechado la ocasión para denunciar "la política ambiental y de seguridad"de Repsol y, además de pedir una moratoria a la explotación de pozos en aguas españolas, exige al Gobierno que emita una declaración de impacto ambiental negativa a los dos nuevos pozos en aguas profundas que ha solicitado la citada compañía, también frente a la costa de Tarragona.

Ecologistas en Acción, por su parte, ve en el nuevo derrame "una prueba más de que los accidentes en este tipo de instalaciones son inevitables", y "una razón más para abandonar el petróleo".

Esta organización cree que "sería mucho más sensato basar nuestra obtención de energía de fuentes que requiriesen una tecnología mucho más sencilla y cuyos accidentes inevitables fuesen menos graves, como es el caso de las renovables".