Castilla y León

Zapatero abre la veda por el liderazgo del PSOE de Madrid

El jefe del Ejecutivo valoró el trabajo del líder del PSM en pasado: «Ha hecho un buen trabajo».

La semana pasada aseguró que no iba a entrar, en público, en la guerra de candidatos a las próximas elecciones autonómicas y municipales, pero no ha podido quedarse al margen. «Se trata de una cuestión muy interna», dijo el pasado viernes Zapatero en Moncloa. Sin embargo, ayer, durante la inauguración de un centro especializado para atletas en León, el secretario general del PSOE no pudo evitar entrar a valorar a los posibles cabezas de cartel para una comunidad en la que debe enfrentarse a dos huesos duros. Lejos de intentar cerrar la polémica de la semana pasada, abrió la caja de los truenos al afirmar que quiere «cambiar las cosas en la Comunidad de Madrid» y para ello intentará concurrir a las elecciones, dijo, «con los mejores».

En septiembre los socialistas comenzarán a abrir los plazos para celebrar primarias en las plazas en las que no haya un candidato claro. Es el caso de Madrid dónde el líder regional del partido, Tomás Gómez, está cada vez más cuestionado. Serán los militantes quienes elijan a sus representantes, pero el apoyo de Ferraz en estas elecciones internas puede vencer, como ya ha ocurrido en otras ocasiones, la balanza de uno u otro lado.

Popular en Madrid

Ante la duda y como hacen los cazatalentos del fútbol, Zapatero está oteando nuevos valores en su cantera madrileña. Uno de los nombres que suena con fuerza para medirse con Esperanza Aguirre es el de la ministra de Sanidad y Asuntos Sociales, Trinidad Jiménez, conocida ya por la «afición» madrileña tras su paso como candidata al Ayuntamiento de la capital hace ocho años, el presidente del Gobiernovaloró su gestión al frente de Sanidad como «muy buena».

A favor de la ministra juega su presencia en la Ejecutiva del Partido Socialista de Madrid y los buenos datos que obtiene en las encuestas frente a otros candidatos. A pesar de esto, muchos son los que aseguran en la dirección federal del PSOE que para «Trini» Madrid supondría una vuelta a la segunda división.

Otro de los fichajes en los que ha puesto Zapatero su ojo, según los rumores más insistentes, es en el Secretario de Estado para el Deporte. El nombre de Jaime Lissavetzky se baraja como posible rival de Alberto Ruiz-Gallardón por el bastón de mando de la capital, a tenor de las palabras de Zapatero que lo metió en la lista «entre los mejores» candidatos para que su partido luche por la Alcaldía de Madrid.

«Más allá de los nombres, lo importante es presentar un proyecto que aspiramos a que sea mayoritario en Madrid. Lo haremos con los mejores, y serán aquellos que los militantes decidan. Entre los mejores está Jaime Lissavetzky. Y punto», declaró el presidente en un guiño al Secretario de Estado, presente en el acto.

El peor parado en la evaluación del presidente fue precisamente el actual líder de los socialistas en la Comunidad de Madrid. Tomás Gómez es candidato fijo en las primarias madrileñas aunque Zapatero, que lo colocó al frente del partido en la comunidad autónoma de Madrid parece no estar muy conforme con la gestión que ha llevado a cabo. «Si me pregunta por nombres, tengo una buena valoración de Tomás Gómez, que ha hecho un buen trabajo al frente del PSOE de Madrid y una buena, buenísima valoración de Trinidad Jiménez», explicó poniendo de manifiesto su preferencia por la ministra. Al presidente no le gustan las «posiciones numantinas» y puede que su autoproclamación como futuro rival de Aguirre en las urnas le cueste a Gómez pasar una de las reválidas más complicadas de su carrera en los exámenes de septiembre.