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Mas condiciona la buena relación con España al éxito del pacto fiscal

El president admite que ha cometido varios «errores» durante su primer año en el cargo

Mas, ayer, durante el tradicional mensaje de fin de año
Mas, ayer, durante el tradicional mensaje de fin de añolarazon

BARCELONA- Hace tiempo que Artur Mas predica que las relaciones entre Cataluña y el resto de España están bajo mínimos. El presidente de la Generalitat cree que el proceso estatutario, culminado con una sentencia desfavorable del Tribunal Constitucional (TC), puso de espaldas a ambas partes e insiste en que la única manera de rehacer las relaciones es a través de un nuevo pacto fiscal. «Si nuestra propuesta es escuchada y atendida, los puentes entre Cataluña y el Estado se reforzarán. En caso contrario, se debilitarán todavía más», afirmó ayer durante el tradicional mensaje que dirige cada año el presidente de la Generalitat.

El del pacto fiscal es el proyecto estrella del Govern de CiU, el que, probablemente, se utilizará para medir el éxito de su mandato. Hasta ahora, la negociación tan siquiera ha comenzado porque, en primer lugar, debe conocerse el grado de acuerdo que existe en Cataluña. «Confío en que el año que viene el Parlament de Cataluña formule la propuesta del pacto fiscal, con el máximo consenso posible, como reflejo del gran consenso social existente sobre esta materia. Confío en que todo el mundo, desde la esfera pública o privada, sepa estar a la altura de las circunstancias que Cataluña necesita y merece», dijo.

La identidad de Cataluña
Lo que está claro es que será imprescindible que haya complicidad entre el Gobierno y la Generalitat para avanzar en este sentido, pero no es menos cierto que ahora mismo las prioridades de Mariano Rajoy se centran en la recuperación económica. «Le pedimos coraje, le deseamos aciertos y le reclamamos respeto hacia Cataluña y auténtico sentido de Estado. Cataluña quiere ver respetada su identidad, sus instituciones, su cultura, su derecho y su lengua», reclamó Mas al presidente del Gobierno.

También el gobierno catalán ha tenido que conjurarse para actuar con valentía durante un primer año muy marcado por los recortes para cuadrar las cuentas. El president sacó pecho por lo hecho. «Dije desde el primer día que plantaríamos cara a los problemas, por grandes que fueran, sin miedo a ser criticados y abucheados. Que actuaríamos sin concesiones al populismo, pensando más en las futuras generaciones que en las próximas elecciones, defendiendo más el bien común que el interés individual, corporativo o partidista», subrayó el titular de la Generalitat.

Mas se siente orgulloso del camino recorrido, aunque admitió que se le pueden imputar bastantes equivocaciones. «Los errores son errores y punto. Lo peor del error no es cometerlo, sino negarse a reconocerlo por exceso de soberbia», consideró. De esta manera, pareció referirse, entre otras cosas, a los fallos de la Generalitat ha cometido recientemente en el pago de las nóminas a los trabajadores públicos mediante la retención sin previo aviso del IRPF.

El president quiso despedir su alocución infundiendo seguridad y optimismo para afrontar los años venideros: «Nuestro país está a prueba desde muchos puntas de vista. Estoy convencido de de que superaremos esta prueba, por grandes que sean los escollos».

Mas no pudo evitar el símil marino –su especialidad– durante un mensaje estructurado en dos ideas: alentar a la ciudadanía a no desfallecer en el camino de los ajustes y dibujar con claridad las ambiciones de Cataluña (pacto fiscal). «Es cierto que cuando pilotas un barco con la mar en calma y el viento en popa, los errores se notan menos; con la mar brava y las olas altas que vienen por todos los lados, los errores se notan más», comentó.

El president tuvo también un recuerdo para todos aquellos que lo pasan mal e incluso pareció referirse a la pérdida de su propia hermana este año. «La pérdida de un ser querido, la enfermedad persistente, el dolor, la soledad no deseada, la discapacidad extrema, la pérdida del trabajo o de la casa... A todos ellos, sin excepción, todo mi afecto».


Proximidad con ERC
El presidente de ERC, Oriol Junqueras, aseguró ayer que su formación se siente «emocionalmente muy próxima» a los presupuestos de Artur Mas. En declaraciones a Catalunya Radio, Junqueras aseguró que en estos momentos hay buena sintonía: «La relación desde el punto de vista técnico, desde un punto de vista del análisis de la situación, y de búsqueda de soluciones con la consejería de Economía está funcionando muy y muy bien».