Valencia sufre su primer corte de luz por impago de facturas

VALENCIA- El retraso en el pago de las facturas provocó ayer el corte del suministro eléctrico de varios edificios dependientes del Ayuntamiento de Valencia. Así, las oficinas de relaciones internacionales, en el primer piso del número 14 de la calle Arzobispo Mayoral, y las del Jurado Tributario, en el quinto piso del mismo inmueble, situado junto al edificio principal del Consistorio, sufrieron las consecuencias del retraso en el pago a Iberdrola. Un hecho que, si bien la alcaldesa Rita Barberá minimizó, la oposición, en boca del portavoz de Compromís Joan Ribó, consideró lamentable en tanto en cuanto afecta a los trabajadores de las dependencias municipales, a los que la hidroeléctrica dejó sin calefacción, por lo que tuvieron que recurrir al abrigo y la bufanda para combatir el frío.
La normalidad no volvió hasta las 13 horas, después de que el Gobierno local llegara a un acuerdo de pago con Iberdrola. Sin embargo, Barberá cree que las eléctricas pueden esperar «porque tienen capacidad de aguantar y con ese dinero podría pagarse a los pequeños y evitar que gente se fuera a la calle».
En cuanto a las denuncias de Compromís, que temen que los cortes no sean algo puntual, la primera edil se extrañó «de que la izquierda tenga tanto interés en defender a los poderosos». Y es que para el Ejecutivo de Barberá la prioridad son las pequeñas y medianas empresas, las que tienen «menos posibilidad de sostenerse». Además, sorprende la actuación de la hidroeléctrica con el Consistorio capitalino, con el que forjó una muy buena relación en el año 2007, cuando Valencia dio todas las facilidades a la compañía para fijar en la dársena la base del equipo que patrocinaba y contribuir a la creación de su imagen como equipo nacional de vela.
 Con todo, el Ayuntamiento lleva varios meses negociando con Iberdrola, compañía a la que pagó siete millones de euros en noviembre y a la que ahora se adeudan seis millones de euros. Por su parte, la eléctrica debe al Consistorio desde hace dos años 2,5 millones de euros por la tasa de utilización del subsuelo -medio millón de euros cada tres meses-. Esa será la cantidad que Valencia devolverá a Iberdrola como pago de la deuda pendiente. El resto, se compromete a abonarlo antes del 30 de abril.