El peligro del azúcar camuflado

VALENCIA- Los alimentos especiales para diabéticos no están exentos de azúcar. De hecho, su contenido calórico es simliar al de los alimentos «normales» y generalmente no están libres de azúcares como la fructosa, o alcoholes como el sorbitol, manitol y xilitol. Por ello, y ante una fechas en la que su consumo es frecuente, los expertos aconsejan estar alerta. Así, la doctora María Argente, del servicio de Endocrinología del hospital La Fe de V Valencia, propone hacer cinco comidas al día, ya que la regularidad en las ingestas favorece el control de la diabetes al tiempo que evita los excesos al no llegar a las comidas con mucha hambre.
También es recomendable que el diabético evite abusar de los alimentos ricos en hidratos de carbono como arroz, pasta o patata, y rehúse por completo aquellos muy ricos en azúcares como azúcar común y miel, fruta en almíbar y confitada, mermelada, productos de pastelería y bollería, o zumos de fruta y bebidas azucaradas. Como sustitutivo para endulzar los postres se puede utilizar aspartamo, sacarina o ciclamato. Asimismo, los mazapanes, turrones y otros productos navideños tienen muchas calorías y azúcares sencillos, por lo que se debe controlar la cantidad que se come seleccionando una o dos piezas y evitando el picoteo.
Las personas con diabetes deben optar por platos que contengan más verduras, carne y pescado, así como por alimentos ricos en fibra (legumbres secas, cereales integrales, verduras crudas).
Del mismo modo, se recomienda beber agua, aunque de forma ocasional se pueden tomar bebidas o refrescos «light» o bajos en calorías. En cualquier caso, se debe limitar la ingesta de alcohol a una copa de vino en la comida y una copa de cava para el brindis. Tampoco debe olvidarse la práctica de ejercicio físico acorde a las posibilidades de cada persona.