La Diputación rebaja en un 49% sus inversiones respecto a 2010

La Diputación trabajará en 2011 con el Presupuesto más restrictivo que se recuerda, reduciendo sus inversiones en los municipios de la provincia en un 49 por ciento respecto a 2010 debido al desplome general de los ingresos y a la imposibilidad legal de suscribir nuevos créditos con bancos y cajas de ahorro.

Según explicó ayer el diputado de Hacienda, Manuel Domínguez, la Corporación provincial verá reducidos sus ingresos en 93 millones de euros frente al ejercicio anterior, debido al recorte en las aportaciones del Estado y la Junta Andalucía. Sólo la desaparición de los fondos Feder supondrá 14,1 millones menos, aunque el gran recorte está vinculado a la limitación del endeudamiento, que impide a la institución consignar 78,9 millones.

Con un nivel del 84,45 por ciento, Domínguez admitió que la Diputación excede el endeudamiento máximo del 75 por ciento que impone la Ley de Presupuestos Generales del Estado a las corporaciones locales y provinciales para permitirles suscribir más préstamos.

Esta situación se traduce en un Presupuesto consolidado de 320,19 millones en 2011 –un 18,15 por ciento menos que en 2010– y en «fuertes medidas de austeridad y contención del gasto». El capítulo que más sufre es el de inversiones, que se queda en 64,2 millones frente a los 129,6 millones del presente año.

Estos recursos sólo permitirán a la Diputación mantener los proyectos presupuestados con carácter plurianual. Continuarán las obras ya en marcha en infraestructuras y servicios «básicos», la cooperación municipal y el Programa de Fomento del Empleo (antiguo PER).
Domínguez reiteró que los servicios al ciudadano «están garantizados», así como todas las iniciativas sociales y los compromisos laborales. El gasto en personal se reducirá un 4,86 por ciento, quedándose en 6,6 millones por la congelación salarial, a bienes y servicios se destinan 38,3 millones (un 1,54 por ciento menos) y a gastos financieros, 4,4 millones (un 25 por ciento menos). Sólo suben las transferencias corrientes (un 9,95 por ciento), con 52,4 millones para entes autónomos como Sevilla Activa o Prodetur.