Castelldefels

Las consecuencias del accidente por Antonio CANO VINDEL

La Razón
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El estrés nos activa en aquellas situaciones en las que percibimos que no tenemos suficientes recursos para atender sus demandas. Este mecanismo pone en marcha un proceso de activación a nivel cognitivo, fisiológico y conductual, que intenta dotarnos de los recursos que nos faltan y que se detiene cuando se consigue el objetivo deseado. Aunque se trata de un proceso normal, pueden surgir problemas con el estrés si nuestro cuerpo y nuestra mente están activándose permanentemente, sin que se permita la recuperación. Una persona sometida a estrés prolongado y con escasa recuperación puede experimentar olvidos, problemas de concentración, pérdida de rendimiento, alta activación fisiológica, agotamiento, insomnio, dolor de cabeza, dolores musculares, contracturas, ansiedad, irritabilidad, aumento del consumo de tranquilizantes, etc. Por supuesto, aparecerán problemas más importantes cuando la situación que provoca el estrés alcance tal magnitud que nos supere por completo y no nos permita dar respuesta alguna, como sucede por ejemplo en los atentados terroristas o en situaciones igualmente traumáticas, como lo sucedido en Castelldefels. En estos casos, además de los citados síntomas, suelen aparecer algunos trastornos mentales como el trastorno por estrés postraumático y la depresión, especialmente en el caso de las mujeres. Por ello, es importante la intervención psicológica dirigida a las personas que más directamente sufren las consecuencias de estos acontecimientos.

Antonio CANO VINDEL. Presidente de la Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés