Aumenta la preocupación en el PSC por la pasividad de su electorado

La comisión ejecutiva del PSC analizó ayer estas encuestas y constató que el partido atraviesa «un momento difícil», según las palabras de su portavoz, Miquel Iceta. Hay dos indicadores que preocupan, sobre todo, a los socialistas: la desmovilización de su electorado y la baja participación que se prevé.

El primer dato es especialmente alarmante porque significa que la parroquia fiel al PSC, la que mayoritariamente llena las urnas de papeletas socialistas, está desmotivada. ¿Por qué? Según explicó Iceta, existen dos motivos: hay una crisis económica muy profunda («eso explica muchas cosas») y hay una radicalización debido a los debates derivados del proceso estatutario. En este punto, el portavoz del PSC echó la culpa al PP por «alimentar el choque de identidades».

Los duelos televisivos
Pero los socialistas se resisten a perder el ánimo porque confían en que, a última hora, los catalanes apreciarán el liderazgo de José Montilla, la gestión realizada durante los últimos cuatro años y sus propuestas de futuro. En todo caso, el PSC es consciente de que a todo este mejunje le falta una buena propaganda y, por eso, confían en los debates cara a cara que Montilla mantendrán con Artur Mas.

Sin embargo, existen todavía muchas dudas sobre estos duelos. ¿En qué canal? ¿Y en qué lengua? El PSC propuso en la campaña de 2006 que hubiera un cara a cara en castellano y otro en catalán, pero CiU sólo se prestó a que Montilla hablara en la lengua que quisiera porque Mas pensaba hacerlo en catalán.

Preguntado por esta cuestión, Iceta no ofreció muchos detalles, aunque aseguró que la cuestión lingüística no será impedimento para acordar con CiU las condiciones de un cara a cara más necesario que nunca para combatir la baja participación. Lo único que aclaró el portavoz del PSC es que Montilla apuesta por un debate de «máxima difusión», lo cual algunos entendieron como un debate en castellano.