OPINIÓN: Ánimas

En otoño se desprenden las hojas de los árboles como si fuesen corazones que se rompen al caer por desamor. Los gorriones parecen menos alborotados y la luz temblorosa de las lámparas de aceite o de los velones iluminan la nostalgia por los seres queridos que nos han dejado pero siguen en nuestro pensamiento vivos, cercanos. La Noche de Ánimas es la celebración dedicada a los difuntos en todas las culturas con el mismo objetivo:dar la paz a los muertos más recientes cuyos espíritus deambulan entre nosotros sin hallar el reposo eterno. Dicen que los espíritus de los muertos que durante su vida sólo habían hecho daño y toda clase de males seguían haciéndolo después. La doble celebración cristiana de Todos los Santos y de los Fieles Difuntos reciben el nombre de Ánimas del Purgatorio o Ánimas. Culto en sufragio por las penas que aún tienen pendientes por el mal que voluntaria o involuntariamente hicieron durante su vida. Los vivos estamos en deuda con los difuntos y si no hacemos obras buenas aplicadas por ellos no nosdejarán en paz. Son creencias ancestrales acogidas por la doctrina cristiana y todas las culturas.La noche de difuntos tañen las campanas a reflexión y a recogimiento. Se encienden velas para que las ánimas encuentren su camino hacia la paz y hacia el reposo eterno que precisa toda la humanidad tras su estancia en esta vida aunque en otras civilizaciones tomen nombres diferentes. En algunos pueblos aseguran que en esa noche las ánimas de sus difuntos se acercan y hacen compañía. A veces se oye sus pasos como un eco del viento que se enreda entre las ramas o nos llama por nuestro nombre golpeando las puertas y ventanas... y les dedico un beso, en especial a las almas que me han amado y a las que no correspondí o nunca me escucharon, mientras repito con Miguel Hernández: Llegó tan hondo el beso/que transpasó y emocionó los muertos.