Sólo el 29% de los empleados secundó ayer la huelga

Salvo los incidentes de las cocheras de Canillejas y el de los viajeros amotinados en la estación de Gregorio Marañón, los servicios mínimos –decretados en un 50 por ciento– se cumplieron con normalidad provocando retrasos de entre tres y 15 minutos con respecto a los horarios normales del servicio.Lo que también se repitió de nuevo fue el baile de cifras respecto al seguimiento de los paros. Mientras desde Metro informaban de que el 29 por ciento de los trabajadores no había acudido a su puesto de trabajo (un porcentaje que baja con respecto al último día en que hubo huelga, el miércoles, cuando secundó los paros el 34 por ciento de la plantilla); los representantes de los sindicatos en la empresa aseguraron que el 90 por ciento de los trabajadores que podían ausentarse de su puesto de trabajo, no se habían incorporado. Según la empresa, además, el 53 por ciento de los empleados que estaba exento de cumplir los servicios mínimos acudió a trabajar, lo que significa que el número de componentes de la plantilla que ayer no hizo huelga ascendió al 71 por ciento del total.El margen para que empresa y sindicatos lleguen a un acuerdo es cada vez más pequeño. El próximo martes los responsables de contabilidad en Metro cerrarán las nóminas con un descuento directo del 5 por ciento. En concreto el recorte será del 10 por ciento ya que se acumulará el porcentaje de recorte en las partidas de personal que quedó establecido en la Ley de Medidas Urgentes que se aprobó el pasado 28 de junio en la Asamblea.El lunes, otra vez AsambleaEl lunes los trabajadores de Metro se volverán a reunir en asamblea para determinar nuevas jornadas de huelga. Quieren alargar, según han informado sus portavoces, los paros hasta el mes de septiembre. De momento las negociaciones con la dirección de la empresa continúan aunque, tal y como explicó el jueves el gerente de Metro, cada vez van más lentas.