Bruselas

La UE quiere mejores resultados de su relación con EE UU y Rusia

El Tratado de Lisboa debería haber reforzado el papel de la Unión Europea en el mundo, pero, un año después de su entrada en vigor, los Veintisiete comprueban que se está quedando en sólo eso, papel

La jefa de la diplomacia europea, a su llegada a la cumbre de la Unión Europea que terminó ayer en Bruselas
La jefa de la diplomacia europea, a su llegada a la cumbre de la Unión Europea que terminó ayer en Bruselaslarazon

La gran recesión ha puesto contra las cuerdas a la primera potencia económica como a ninguna otra región del planeta, el descenso demográfico promete un futuro de irrelevancia y las claras diferencias entre los socios en política exterior hacen que la Unión oscile entre la cacofonía o la afonía, en lugar de la voz única que debería haber ayudado a tejer el nuevo Tratado.

La representante de esa voz, la alta representante de la Política Exterior, Catherine Ashton, hizo ayer autocrítica ante los líderes europeos en la última cumbre del año y prometió una aproximación más «creativa» y con agendas «menos cargadas» cuando se trate con los pesos pesados del tablero mundial: Estados Unidos, China y Rusia.

Durante la mañana de ayer, en el último día del Consejo Europeo, la jefa de la diplomacia pasó revista a las relaciones con los socios estratégicos, subrayando cuál será el leitmotiv de su trabajo: «Menos prioridades, mayor coherencia y más resultados».

En los papeles de presentación, a los que tuvo acceso este diario, Ashton dijo a Merkel, Sarkozy, Zapatero y el resto de gobernantes que «existe la necesidad de fijar en el nivel político más elevado las prioridades estratégicas». Con los grandes, «necesitamos ser creativos, evitando procesos pesados y agendas sobrecargadas».

La británica parece haber sacado la lección de los encuentros con la primera potencia. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, canceló su cumbre con la UE el pasado mayo por su desinterés, y cuando finalmente se celebró en los márgenes de la cumbre de la OTAN el pasado noviembre, Obama confesó que «no es la cumbre más excitante porque estamos de acuerdo en todo».

Para recuperar el pulso no sólo con Estados Unidos, sino con los otros que ya piden paso, Ashton quiere «una preparación más efectiva y seguimiento de las cumbrespara asegurar que estén mejor dirigidas a garantizar los objetivos europeos».

La presentación de la británica ante los Veintisiete fue una primera revisión preliminar, y analizará con mayor profundidad las relaciones con Rusia el próximo mes de enero para, a continuación, hacer lo mismo con China. Pero como primera sugerencia para avanzar en las relaciones bilaterales destacó la participación en proyectos conjuntos, «en torno a los cuales han llegado los resultados más significativos».