El Teatro Real reduce en un 10% el consumo energético

«C(h)oeurs (Coros, corazones) será el próximo espectáculo que comenzará este mes en el Teatro Real, más conocido como la ópera de Madrid. El escenario de «este homenaje a la condición humana, a nuestra forma de sobrevivir» como manifestó en su día el coreógrafo del espectáculo, Alain Platel, será más rápido de montar. El motivo: Simatic, un sistema de control automático de la maquinaria escénica que ha instalado Siemens, que permite ahorrar tiempo y «lograr un ahorro del 10 por ciento de energía», explica Pascual Dedios, consejero delegado del sector Industria de Siemens.
«Antes tenían que hacer una estimación del peso de las escenografías. Este sistema era más lento, ya que tenían que hacer movimientos para ver cómo quedaba y luego corregían. Ahora se puede colocar cualquier escenografía y desplazarla directamente, lo que supone un ahorro en tiempo de unos 30 minutos por representación», precisa.

Arranque y frenado
Para ello –prosigue–, los sistemas se han instalado por los más de 60 metros de la caja escénica, repartidos en distintas alturas por encima y por debajo del escenario, junto a los telones, las varas y las torres de luz». «Y al poder reducir movimientos se logra ese ahorro energético, que puede parecer poco, pero no lo es», añade Pascual Dedios.
Desde el teatro aseguran que «el nuevo sistema de control es significativamente más rápido, por lo que los movimientos de la maquinaria escénica son más suaves y suponen un menor consumo eléctrico en las etapas de arranque y frenado. Gracias a esa rapidez de respuesta ha sido posible suprimir movimientos anteriormente necesarios para el cálculo de peso de la escenografía durante su montaje. El ahorro energético debido a todas estas mejoras ha sido de un 10 por ciento aproximadamente».
Además, el sistema de control automático de la maquinaria escénica permitirá ahorrar en gastos de mantenimiento, así como en costes de formación, ya que Siemens ha formado al personal del teatro durante los cuatro años de duración de este proyecto que se ha realizado en verano, cuando no hay temporada en el teatro. Y quizá lo más importante de este sistema es que permite a la ópera poder representar cualquier obra por muy complicada que sea la puesta en escena, lo que sin duda hará las delicias de los espectadores, que durante marzo podrán deleitarse de la representación de C(h)oeurs en la que participarán diez bailarines y un coro formado por 80 personas.