La mayor filtración militar de la historia de Israel

Los nombres, los números del carné de identidad, los cargos y las direcciones postales de los «perpetradores directos» de la intervención militar en la franja de Gaza fueron revelados por esta página web no autorizada y anónima con el fin de que fueran procesados individualmente.

En dos días recibió 5.500 visitas, pero ayer por la tarde fue suspendida por una presunta violación del alquiler del espacio web. La información había sido «pirateada» supuestamente de redes sociales, aunque Facebook dio la orden de impedir que sus usuarios pudieran publicar la lista en el sitio web y evitar una difusión en cadena. La publicación de los datos personales de los soldados en internet es un hecho sin precedentes en el país hebreo.

El documento titulado «Los criminales de guerra israelíes» incluye desde soldados «de bajo rango hasta los principales escalafones de las Fuerzas Armadas». En él se podía leer que «no sólo actuaron de acuerdo a un mecanismo estatal asesino sino que animaron activamente a otras personas a hacer lo mismo» y añadía, según la edición on line de «Jerusalem Post», «ellos poseen una responsabilidad personal distintiva». También advertía de que «el proyecto acaba de empezar» y pedía a los internautas «que difundieran la información por todo el mundo». La repentina suspensión de la página y la decisión de las comunidades sociales como Facebook limitaron su propagación, aunque el tráfico en estos dos días había sido muy escaso.

Entre los 200 soldados identificados con imágenes, en el número 64 se encontraba el jefe del Estado Mayor del Ejército israelí, Gaby Ashkenazy, quien precisamente había sido criticado por tramitar 400 denuncias recibidas a raíz de la Operación Plomo Fundido. El 4 de noviembre se conoció que las Fuezas Armadas habían investigado las 400 reclamaciones, que 50 de ellas hacían referencia a actos criminales y tres habían terminado en acusación. Ashkenazy fue cuestionado por llevar los interrogatorios postconflicto demasiado lejos y de que sus mandos militares no dieran un respaldo suficiente a sus subordinados implicados en el proceso.

Ayer, los medios de comunicación israelíes se hacían eco de la presunta obstrucción de un militar hebreo en la investigación de la muerte de una mujer en los tres días de ofensiva de la Brigada Givati en enero de 2009 en la Franja. El soldado estaría ya imputado por el caso que fue expuesto por la organización israelí de derechos humanos, B'tselem, y citado en el informe Goldstone.


Al Qaida amenaza en hebreo
El grupo Brigadas Ansar al-Suna, próximo a Al Qaida, difundió ayer un mensaje de amenaza a Israel grabado en hebreo a través de una página web islamista. Esta vez los extremistas han optado por amenazar a los israelíes en su propio idioma con una grabación, colgada en la web Orgullo del Islam, que tiene muchos fallos gramaticales y mala pronunciación.