Disney

Amaya Arzuaga y Miguel Palacio llevan su moda Pirata a Disneyland

Los modistos españoles Amaya Arzuaga y Miguel Palacio vistieron con sus ideas a dos personajes de la atracción y la saga cinematográfica "Piratas del Caribe"en un acto celebrado en Disneyland París, en el marco de su Festival de Momentos Mágicos.

Acompañaron a ambos creadores sus musas, la cantante Vinila von Bismark, vestida de sirena de lentejuelas doradas con espectacular escote por Amaya Arzuaga, y la escritora Vega Royo Villanova convertida en pirata, con un atuendo adornado con una gran calavera lateral por arte de Miguel Palacio.

Enfundada en su traje de escamas doradas, Vinila von Bismarck estuvo perfecta, según comentó hoy a Efe Amaya Arzuaga al resumir la experiencia a la que se lanzó hace algo más de un mes y que culminó anoche en Disneyland.

Entre el abanico de nuevos personajes del último episodio de la saga, "Piratas del Caribe: En mareas misteriosas", la modista eligió el de la sirena, explicó.

Para vestirle con un traje de manga larga y un escote hecho a medida que permitía a Von Bismarck lucir su espectacular tatuaje pectoral.

Era un verdadero traje de sirena con el que no se puede andar pues "está pensado realmente para el mar"no para ir por tierra, añadió.

Ella estuvo "superprofesional, movía lo cola y no se quejaba nada cada vez que había que trasladarla de roca. Está haciendo algunos pinitos como actriz y se nota, porque su expresión corporal fue estupenda", subrayó.

Las lentejuelas con las que trabajó son cuadradas y aunque el efecto es dorado, tienen pinceladas plateadas, para dar la sensación de las escamas de un pez, añadió.

Al crear su modelo buscó el contraste ideal entre la imagen de su portadora, "mucho más arriesgada, el vestido, que también lo es de otra forma, y la imagen que tiene todo el mundo inconscientemente de Disney", señaló.

Feliz con esta experiencia mágica que por una noche le permitió vestir a una sirena, Amaya Arzuaga dijo haberse sentido muy libre e incluso haberse permitido la licencia de construir con plumas la cola de pez que ponía broche final a su vestido e inmovilizaba a su portadora.

De lo que acontecerá ahora al traje que durante unas horas inmovilizó a su musa en Disneyland, transportada de roca en roca en brazos de piratas, la modista no tiene idea, aunque mientras se decide su suerte planea probar con él su resistencia en la piscina, aseguró.

Miguel Palacio eligió por su parte el personaje que interpreta Penélope Cruz en el último episodio de "Piratas", el de la seductora corsaria Angélica, cuyo destino ésta tan unido al del legendario capitán Jack Sparrow (Johnny Depp) y vivió el evento como si fuese "casi un juego".

No intentó "hacer un disfraz y un vestuario de película", sino conseguir una imagen que "por forma, volumen y estética"pudiese ser una silueta que podría estar perfectamente dentro de sus colecciones, aunque le dio "ciertos toques, un giro", para que evocase la figura de un pirata, apuntó a Efe.

Se dijo encantado con el resultado de esta presentación mezcla de homenaje entre moda y cine, en la que se recreó la película "Piratas del Caribe", hecha a partir de esa atracción que lleva muchos años en Disney, resaltó.

La encargada de llevar su modelo fue su amiga Vega Rollo Villanova, "a quien le divierte mucho todo lo que sea moda, siempre está rodeada de cosas de moda y hasta tiene un blog de moda, en el que habla de todo tipo de eventos y colecciones", apuntó.

En esta ocasión, lució un conjunto todo negro de pantalón corsario y cintura muy marcada, con un enorme broche en forma de calavera blanca "bordada con cristal casi todo transparente"sobre uno de los hombros.

El acto pirata tuvo lugar en "Adventureland", cerca de la fortaleza del siglo XVII donde tiene su cuartel general la versión parisiense de la atracción Piratas del Caribe, la última que en 1967 supervisó el propio Walt Disney y que luego inspiró la celebrada saga cinematográfica.

Anoche, el espectáculo estuvo capitaneado por el propio Jack Sparrow, en compañía de tragafuegos, mujeres piratas y corsarios, que acompañaron a los dos modistos españoles y a sus musas en todo momento.