Campaña electoral

Ahora es el momento por Ana Mato

La Razón
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Ayer los ciudadanos decidieron mayoritariamente, con su voto, cambiar el rumbo de España y apostar por un nuevo proyecto político, el del Partido Popular, que lidera Mariano Rajoy.

Por eso, lo primero que quiero hacer es agradecer a esa gran mayoría de ciudadanos su apoyo y su confianza. Somos conscientes de las esperanzas depositadas en nosotros y de la responsabilidad que asumimos.

Hemos puesto fin a la campaña electoral más larga de nuestra historia y ahora, tras hablar los ciudadanos en las urnas, toca gobernar.

En estos momentos, tengo que decir que la alegría por una victoria histórica no ocupa la totalidad de mis pensamientos. Pienso en la tarea que como país tenemos por delante.
Recibimos la peor herencia que un Gobierno puede tener: 5 millones de parados, desconfianza en los mercados, y una enorme deuda que habrá que gestionar. Pero los ciudadanos deben saber que los problemas que tenemos no son mayores que la determinación del Partido Popular y de Mariano Rajoy para, con el concurso de todos, sacar a España adelante.

Sabemos que es el reto más importante de nuestra reciente historia democrática, pero también sabemos que los españoles somos capaces de lo mejor y de superar cualquier crisis si nos lo proponemos. Y para ello debemos llevar a cabo un gran proceso de reformas y centrar todos los esfuerzos en las prioridades y en las soluciones a los problemas reales de los ciudadanos.

Reformas en nuestra economía, en el sector financiero, en nuestras administraciones, en el sistema educativo y en nuestra política exterior. Todo ello para cumplir un solo objetivo: salir de la crisis y comenzar a crear empleo.

El camino no va a ser fácil y por eso el esfuerzo deberá ser colectivo, pero quiero aprovechar estas líneas para lanzar un mensaje de confianza a los ciudadanos. Somos un gran país y no permitiremos que nadie se quede en la cuneta en este viaje hacia la recuperación.

Tenemos un gran sistema de bienestar y protección social, y por eso debemos hacer todo cuanto esté en nuestra mano, no sólo para garantizar su solvencia, sino para reforzarlo aún más y ayudar a todos los ciudadanos que lo necesiten.

Hoy empieza una nueva etapa. Debemos desterrar el enfrentamiento y apostar por la concordia, huír de la división y fomentar la unidad, centrarnos en las cuestiones importantes y prescindir de los debates estériles, recuperar el prestigio de España en la Unión Europea y en el mundo, que nunca debimos perder y, por encima de todo, confiar en que saldremos adelante. Yo estoy convencida de ello.

Hoy hay motivos para mirar al futuro con gran optimismo. Hoy, empieza el cambio.