Nueva York
Piqué entra en el juego «sucio»
Fuentes cercanas a los ex empleados aseguran que el jugador sembraba cizaña. LA RAZÓN ha tenido acceso en exclusiva el contenido de las demandas contra Shakira
Denuncias, extorsión, amenazas... Nunca hasta ahora Shakira se había visto envuelta en un juego como éste. Y, justamente sucede en un momento tan especial en su vida. Este miércoles confirmó su embarazo a través de las redes sociales. Pero mientras Piqué se prepara para cambiar pañales y actualiza su imagen de perfil con la foto de un chupete, la artista trata de lidiar con sus problemas legales. Su intachable trayectoria se ha visto ensombrecida supuestamente por 150.000 euros: la famosa cifra que sus ex empleados Divier Hernández y Maritza Isabel Ávila exigen como «liquidación por sus años de trabajo». Y ahora, por si fuera poco, el abogado de éstos, Abelardo de la Espriella, vuelve a mover ficha al presentar una tercera demanda en su contra, en este caso, penal, y en Colombia, por un delito de calumnia agravada. Pero ¿es realmente una cena, un pollo, o incluso, una mala contestación el desencadenante de esta situación? Parece que no. Según ha podido conocer LA RAZÓN, la verdadera piedra en el zapato de sus ex empleados era Piqué. Al parecer, desde que el jugador del Barcelona se fue a vivir con la de Barranquilla no hizo sino sembrar la discordia entre su novia y sus ex empleados: «Hay una molestia de Piqué con sus condiciones. ‘‘Shak'' tenía una relación muy familiar con Divier y Maritza hasta que apareció el catalán», afirman fuentes cercanas a su defensa. Por lo visto, aunque los problemas nunca llegaron a mayores, la colombiana cambió su forma de comportarse con ellos porque «Piqué sembraba cizaña en su contra. Buscaron cualquier excusa para echarles. Al señor le parecía desastroso tener cerca a esta gente y que tuvieran tanta confianza con Shakira», afirman personas relacionadas con su exculpación, y añaden: «La influencia de Piqué ha sido determinante para muchas de las conclusiones erráticas de Shakira». Y es que por lo visto, el futbolista valora ante todo la vida en pareja, sin trabajadores ni asistentes. Ya lo dijo este martes en su página de Facebook: «Despertarse por la mañana con la música a tope, bajar al comedor y ver cómo está bailando tu mujer #notieneprecio». Por su parte, Divier en declaraciones a este periódico aseguró que «la relación con Pique siempre fue cordial. No tuvimos tiempo suficiente para conocerle bien. Apenas fueron siete meses, no es igual que con De la Rúa o Shakira, a quienes consideraba como mi familia». Aunque reconoce que «quizá pudo haber como un poquito de celos en ese sentido, pero nunca tuvimos un enfrentamiento directo con él». «De patitas en la calle» De ser ciertas las acusaciones, los caprichos de Piqué podrían salirle muy caros a la cantante. Así, el abogado de sus ex empleados declara que «cuanto más tiempo se retrase en la liquidación, más dinero tendrá que pagar. La demanda laboral es un taxímetro». Por lo visto, ya ha habido varios intentos de negociar aunque todavía no existe un acuerdo: «Han llamado para ofrecer 100.000 euros en unos términos ridículos. La cifra es menor a la que tienen derecho los trabajadores, y además, quieren pagarla a plazos. Hemos denegado la oferta. Vamos hasta el final con todas las consecuencias», asegura De la Espriella. Este periódico intentó contrastar esta información con la defensa de Shakira, el despacho de Fox Horan & Camerini en Nueva York, pero contestaron que «de momento no realizarían declaraciones a los medios». Al parecer no es la primera oferta que reciben Divier y Maritza. El día que les fue comunicado el despido, les ofrecieron recibir 6.000 euros como liquidación. Al no aceptar, cuenta que les citaron el día 30 de mayo con un notario en casa de Nadine, la asistenta personal de Shakira, que vivía un piso por encima de ella. «Tampoco lo aceptamos, así que nos dijeron que debíamos dejar la casa, y nos enviaron por e-mail dos pasajes a Colombia para volar el día 31», explica. Sin embargo, nunca subieron a ese avión porque sentían que «querían deshacerse de nosotros . Nos pusieron de patitas en la calle y tuvimos que pasar la noche en un banco con una niña de cinco años. Fue horrible», asegura Divier. Según cuenta, fue entonces, cuando llamó a De la Rúa, que se ofreció a darles cobijo y ponerles en contacto con un abogado. «Me dijo: «Con gusto te voy a ayudar, pero ¿cómo ha podido ocurrir esto tras tantos años?», relata. Un sueldo mileurista Según las demandas a las que ha tenido acceso este periódico, trabajó como chófer y cocinero durante once años, mientras que Maritza fue cocinera, limpiadora y asistenta de compras con una antigüedad de 24 años, de acuerdo a un contrato verbal y a tiempo indefinido. El sueldo de cada uno de los ex trabajadores ascendía a 1.550 euros y se percibían mediante transferencia bancaria emitida por la compañía Adval Consulting, propiedad de Shakira. Asimismo, recibían una parte en especie correspondiente al alojamiento y disfrute del piso en el que vivían, un total de 576 euros cada uno. Para Abelardo de la Espriella «es repugnante lo que han hecho. No sólo no les pagan, sino que les presentan a nivel mundial como unos delincuentes con mentiras; ellos no la extorsionaron». Una opinión compartida por sus abogados de Barcelona, Fabregas & Associats, pese a que esta semana han decidido desvincularse del caso: «No nos interesa el carácter mediático que ha tomado, sentíamos una falta de control sobre nuestros defendidos. A finales de julio sus clientes se vieron obligados a regresar a Colombia ya que su visa concluía en dicho mes, y según Divier, no tenían ni para pagar el billete de avión. Desde entonces, asegura que viven un «auténtico calvario: se nos acabó la vida; la gente nos señala, en Colombia decir extorsionistas es lo peor que te pueden llamar», afirma, y añade: «No hemos perdido simplemente nuestro trabajo, también a amigos de toda una vida: la familia Mebarak. Estamos heridos, tenemos un resentimiento muy grande con ellos. Si tan siquiera intentaran dialogar...». Y, ¿todo por un pollo?
INDEMNIZACIÓN POR DAÑOS MORALES El pasado lunes se interpuso en la Fiscalia General de Colombia una denuncia penal contra Isabel Mebarak Ripoll (Shakira) y su abogado Ezequiel Camerini por calumnia agravada, al señalar a sus dos ex empleados como extorsionistas, sin que hubiera de por medio una denuncia por este hecho y mucho menos pruebas. Asimismo, reclaman 9.040 euros como indemnización moral para cada uno de los ex empleados por los daños morales sufridos. «Por muy diva que sea no está por encima de la Ley, si no rectifica, tendrá que acudir a los tribunales», declara De la Espriella. Por lo visto, en dos meses podrían conocerse más detalles a este respecto ya que «deberán concurrir a una primera audiencia a más tardar en noviembre».
¿Cómo será el waka-bebé? Era un secreto a voces. Shakira y Piqué serán papás. Y a raíz de esta buena nueva, LA RAZÓN realiza un fotomontaje para poner cara al futuro waka-bebé. ¿Tendrán los ojos de su padre? ¿La nariz de su madre? Los rasgos de ambos son muy diferentes. De Shakira destaca su exotismo, pese a su rubio actual, es morena. Mientras que Piqué posee la tez clara y los ojos azules. Si fuera un niño, podría tener el pelo rubio y los ojos claros, heredados de su padre. Mientras que si fuera una niña, podría tener el cabello más oscuro, los ojos grisáceos y la nariz chata.
«La Shakira de ahora no es la que nosotros conocimos» Se conocieron hace más de dos décadas cuando la cantante tan sólo tenía nueve años y la que ahora parece ser su mayor enemiga, trabajaba al servicio de la familia Mebarak en Colombia. «Prácticamente, Shakira pasó toda su vida en compañía de Maritza. La confianza, compromiso y cariño eran plenos», afirma Divier. Tanto que era considerada la madrina de su hija de cinco años, y De la Rúa, el padrino. «Maritza no se cree lo ocurrido. Repite que la Shakira de ahora no es la que conocieron», asegura su abogado. Por lo visto, la artista incluso pagaba la educación de ésta en una escuela privada de Barcelona. «Mi hija la adoraba, la idolatraba, tenían una relación preciosa, ‘‘Shaki'' la ayudaba con las clases de inglés, de modelaje, de natación, era su ‘‘Hala''», afirma Divier, y añade: «Lo cierto es que tenemos recuerdos muy lindos junto a ella. Son muchos años de trabajo, de viajes, de giras junto a ella. Como por ejemplo el pasado Año Nuevo, lo festejamos juntos en su casa de Miami».
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