El presidente electo de México ofrece ayuda a España para salir de la crisis

Peña Nieto hizo estas declaraciones en un encuentro con empresarios españoles en Madrid, ciudad que visita hoy dentro de su gira europea, y en la que además se reunirá con el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y el Rey Juan Carlos I.

El presidente electo de México expuso ante los empresarios españoles las principales estrategias económicas que pondrá en marcha una vez llegue al Gobierno, alguna de las cuales servirán, según explicó, para lograr "el desarrollo de mi país, pero también ayudarán a salir a España de la crisis".

"España es nuestro segundo socio comercial más importante en la UE y el primer país inversionista con más de 45.000 millones de dólares (unos 34.700 millones de euros), pero esta relación tiene aún mucho que dar para beneficio de ambos pueblos", dijo.

Por ello, Peña Nieto explicó a los empresarios españoles las principales líneas de acción de su próximo Gobierno, "consciente de la condición óptima que tiene México en estos momentos para ser competitivo frente a la región y a otros países".

"Seguiremos trabajando en una economía de libre mercado, pero haciendo más énfasis en el carácter social. Crearemos una economía de comercio, pero con sentido social, aprovechando los acuerdos que tenemos con otros países", señaló.

El presidente electo de México subrayó los beneficios de poseer una mano de obra cualificada, "aunque no muy aprovechada, algo que deberemos hacer ahora".

"Contamos con una población joven que puede participar en la acción productiva y tenemos que desarrollar espacios de oportunidad para su inserción", aclaró.

Recordó la "localización estratégica de México", cerca de América del Norte, "con quienes tenemos firmado un Acuerdo de Libre Comercio", y otro con América Latina "con un gran potencial".

En ese sentido, subrayó el interés de su próximo Gobierno por "extender y ampliar"la presencia en la región y "consolidar los mecanismos de acuerdos comerciales", especialmente en la Alianza Pacífico suscrito con Colombia, Perú y Chile, que ayudará a ampliar la relación comercial con Asia y otros futuros países miembros.

Peña Nieto hizo referencia también al sistema de comunicaciones "modernas y en crecimiento"de México, así como a sus riquezas naturales, y en ese sentido abogó por impulsar el país como "una potencia en energía".

 "Debemos llevar a cabo una reforma energética que nos permita ser más competitivos y tener más participación privada con la empresa Petróleos Mexicanos (PEMEX)", indicó, aunque precisó que eso "no significa que PEMEX se vaya a privatizar".

"Es una empresa nacional y es el Estado el que mantiene el control, la propiedad y la rectoría de los recursos. Esta condición debe mantenerse. No se va a privatizar", subrayó.

Peña Nieto apostó también por "impulsar el crecimiento económico como motor del desarrollo nacional"y especificó varias acciones para acelerarlo y "lograr que sea sostenible".

Entre esas acciones destacó la autonomía del Banco de México, el manejo responsable de las finanzas públicas y el fomento de la competencia económica en todos los ámbitos.

"Para ello crearemos organismos reguladores con más capacidad para combatir prácticas de monopolio, así como tribunales especializados en ello. El Gobierno debe alentar la competencia económica en todos los ámbitos", dijo.

Explicó también la necesidad de elevar el crédito en el país "y revisar con la banca los mecanismos que, dentro de la legislación, puedan incentivar el otorgamiento de ese mayor crédito".

Igualmente anunció la puesta en marcha de un nuevos sistema de seguridad social universal que ofrezca "unas condiciones mínimas para todos los mexicanos".

Peña Nieto aseguró que, con todas esas líneas de acción, su Gobierno buscará tener "una mayor presencia comercial en el mundo", tomando "mayor ventaja de los acuerdos comerciales"que México posee con más de 44 países, entre los que destacó los de la UE.