Mantra electoral contra Gallardón

MADRID- Se repite una y otra vez. La hipotética marcha de Alberto Ruiz-Gallardón a otros escenarios políticos alejados de la Alcaldía de Madrid se convierte durante cada campaña municipal en el arma arrojadiza preferida de sus rivales. En los últimos días hemos oído repetir en varias ocasiones al candidato socialista Jaime Lissavetzky que el voto que den los madrileños a Gallardón tiene trampa, que si se le vota a él, en realidad es una apuesta directa por la número dos en la lista del PP, Ana Botella, que se convertiría así en la alcaldesa de la capital. Lejos de utilizar un argumento electoral novedoso, Lissavetzky ha optado en la recta final de la campaña por recurrir a una consigna ya repetida por sus predecesores. Basta con tirar de hemeroteca para recordar que éste fue uno de los ataques más frecuentes que le lanzó su anterior oponente socialista, Miguel Sebastián, durante la campaña de 2007.
Entonces, el actual ministro de Industria enarboló la bandera del abandono para tratar de robarle algún voto a Gallardón. No lo consiguió. Sebastián llegó a retarle para que «desvelase antes del 27-M si piensa dejarnos a Ana Botella de alcaldesa». Una y otra vez repetía los peligros de votar a Gallardón por la supuesta marcha del actual alcalde de Madrid. Sin embargo, los hechos son tercos y se empeñan en dar la razón al primer edil, que permanece, cuatro años después, al frente de la Alcaldía madrileña. Durante los años que lleva en la política madrileña, Gallardón no ha terminado una legislatura con el mismo oponente al que se enfrentó en las urnas. Ha visto cómo todos ellos se han ido marchando a otros lugares políticos. Desde Joaquín Leguina a Cristina Almeida, pasando por el propio Lissavetzky o Trinidad Jiménez. Uno de estos casos de abandono, quizá el más llamativo, fue el de Miguel Sebastián. El entonces candidato socialista no llegó ni siquiera a tomar posesión de su cargo y se fue antes de haber llegado.
Además, Sebastián había asegurado en varias ocasiones que se quedaría en el Ayuntamiento fuese cual fuese el resultado. Es más, según ha podido saber este diario, remitió al actual alcalde una carta manuscrita, antes de campaña, en la que le aseguraba que no tenía intención de volver al ámbito universitario, como profesor. Meses más tarde, en octubre de 2007, se incorporaba a la docencia. Esta campaña, como no podía ser de otra manera, vuelve el mantra electoral del abandono contra Gallardón.

Un Madrid más habitable
Gallardón anunció ayer que revisará el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) bajo criterios de sostenibilidad y cohesión social y territorial, con el objetivo de construir el Madrid del siglo XXI. Mirará hacia «espacios de oportunidad» como el entorno de Madrid Río, las nuevas áreas industriales o comerciales, y los ejes de prolongación de la Castellana o el de Delicias-Méndez Alvaro-Abroñigal. En este proceso se prestará especial atención a los distritos exteriores de la M-30, aunque sin olvidar el centro, informa María Romero.