Elecciones europeas

Sarkozy insinúa que aspirará a un segundo mandato en 2012

A un año y medio de las presidenciales, la clase política francesa ya ha comenzado a tomar posiciones de cara a la inminente carrera al Elíseo. Desdiciéndose de su inicial intención de esperar al próximo otoño, el actual presidente de la República, Nicolas Sarkozy, insinuó ayer su deseo de luchar por la reelección en 2012

Sarkozy aguarda en El Elíseo la llegada del primer ministro libanés
Sarkozy aguarda en El Elíseo la llegada del primer ministro libanéslarazon

Durante una reunión con una treintena de diputados y senadores de su partido, la Unión por un Movimiento Popular (UMP), Sarkozy aseguró que «estoy ahí para dos mandatos, no más», según revelaron a France Presse algunos de los asistentes. «Después será la ‘dolce vita'», añadió en tono jocoso.

«Hay otra vida después del Elíseo. En nuestra familia política, hay muchos talentos que hay que hacer vivir. Yo no quiero que nadie me acuse de querer hacer una novatada a quien sea. Yo no estoy ahí para cortar cabezas. Estoy muy contento de que haya talentos. Y en el momento dado [en las presidenciales de 2017], que gane el mejor», explicó Sarkozy.

Ante una popularidad en caída libre (28%), el líder conservador ha tratado durante las última semanas de recuperar el protagonismo con su reciente remodelación de Gobierno.

En la oposición, Ségolène Royal, que perdió frente a Sarkozy en 2007 con el 47% de los votos, anunció el lunes por sorpresa que participará en las primarias socialistas para repetir como cabeza de cartel. Entrevistada por dos periódicos regionales sobre su futuro, Royal declaró que «ha llegado el momento de avanzar con claridad y simpleza». «¿Quién no ve que la derecha ya está en campaña?», se preguntó la presidenta de Poitou-Charentes.

Este movimiento de Royal, que en 2008 fracasó en su intento de hacerse con las riendas del partido, ha dejado descolocados a los otros dos dirigentes con aspiraciones presidenciales: Martine Aubry, primera secretaria del PS, y Dominique Strauss-Kahn, director gerente del FMI y que, según los sondeos, derrotaría a Sarkozy en una hipotética segunda vuelta con el 62% de los votos.