Administración Pública

La ampliación de Fibes «no se ajusta a derecho»

La Razón
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Sevilla- La Cámara de Cuentas ve irregularidades en la encomienda de gestión de las obras de ampliación del Palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla (Fibes) realizada por el consorcio a Emvisesa. Según se desprende del informe de «Fiscalización de regularidad del consorcio del palacio de Exposiciones y Congresos de Sevilla», correspondiente al año 2009 se entiende que dicha adjudicación «no se ha ajustado a derecho al no ser esta empresa municipal un medio propio del consorcio».

Estima que dicha gestión «se ha practicado sin atender a ningún principio relativo a la consignación presupuestaria del gasto ni a la existencia de crédito para estas obras, no incluyéndose en el convenio entre Emvisesa y el consorcio el coste real de realización de la encomienda». De esta manera, apunta que de acuerdo a lo establecido en la Ley, «se hace necesario para el inicio de cualquier contratación la incorporación al expediente del certificado de existencia de crédito, la fiscalización de la intervención y la aprobación del gasto». Para la Cámara de Cuentas, Emvisesa «ha adjudicado las obras de ampliación sin que se haya producido la modificación formal de los estatutos del consorcio exigidos en el convenio de colaboración firmado entre el consorcio y la empresa municipal en 2007».

Según los datos ofrecidos por la empresa municipal, se obtiene un déficit de financiación «de algo más de 33 millones de euros» y precisa que los costes de ejecuciones reales «han supuesto un incremento del 90,93%, con respecto a los presentados en el proyecto original, incrementándose un 20,78% con respecto al proyecto reformado».

Por otro lado, este organismo ha detectado la ausencia de documentación en los archivos, puesto que «no se tiene constancia del registro de los apuntes contables del ejercicio 2002, por lo que no se han elaborado, formado ni aprobado las cuentas anuales de ese año». De este modo, la información contenida en el balance de situación a 31 de diciembre de 2001 «no se ha trasladado a los ejercicios siguientes y por tanto, al ejercicio fiscalizado». Esta situación provocó que la información incluida en el balance de situación a 31 de diciembre de 2003 «sea únicamente la generada en los apuntes de la contabilidad de ese ejercicio por lo que todos los registros históricos de las cuentas patrimoniales» no se han podido incluir en el balance relativo a las cuentas del ejercicio de 2009.