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Sanidad ahorra 36 millones con las primeras medidas de ajuste
Valencia- La Conselleria de Sanidad ha logrado ahorrar 36 millones de euros en los dos últimos meses tras poner en marcha el plan de ajustes de la Generalitat. De éstos, 26 corresponden al área de farmacia y el resto, a partidas como la gestión de servicios, ahorro en gastos corriente o el apartado de personal. De hecho, este último es el que se lleva gran parte del protagonismo, ya que una «gestión más eficiente» de rotaciones y horarios ha permitido un ahorro de 6,5 millones de euros en nóminas (estimado respecto a lo pagado en 2011), a lo que habría de sumarse en un futuro la reducción del complemento de carrera profesional. Los recortes que afectan a los equipos directivos dependientes de Sanidad han supuesto un ahorro de unos 100.000 euros en un mes.
Respecto a los conciertos con otras empresas, la disminución en un 7,5 por ciento del precio de las pruebas concertadas ha permitido una reducción del gasto cercana a los 2,5 millones de euros.
Un solo menú y menos luz
Por otra parte, el cobro de duplicados de tarjeta SIP y otras tasas han significado unos ingresos adicionales de 100.000 euros en los meses de enero y febrero, además de un ahorro de 96.000 euros, que fue el montante que destinó el Departamento de Luis Rosado a la renovación de duplicados de tarjeta sanitaria en los mismos meses de 2011.
Otra de las partidas que han permitido ajustarse al plan promovido por el Gobierno valenciano, es la asunción íntegra de intervenciones de cataratas. Así, durante el primer mes de aplicación (el pasado mes de febrero), el ahorro ha sido de 720.000 euros (cifra resultante del cálculo de lo que la Conselleria gastó en este tipo de operaciones durante el mismo periodo el año pasado).
En cuanto a las medidas de eficiencia en Departamentos de Salud, aún no están cuantificadas, salvo las de eficiencia energética, que han ahorrado 120.000 euros hasta el momento, pero se espera que sean significativas. A ellas habrá que sumar en breve otras medidas aprobadas en el Decreto del 5 de enero y que todavía se están ultimando como son el cobro a pacientes extranjeros, la unificación de menús o la imagen digitalizada.
Pero sin duda el gran ajuste viene del área de Farmacia. En enero se consiguió una reducción del gasto cercana a los doce millones, según declaró el lunes el conseller de Sanidad. A falta de cerrar el mes de febrero, Rosado prevé que a estos doce millones se sumarán otros catorce millones de euros. Este ahorro se ha alcanzado con la emisión de 230.000 recetas menos, la revisión de 13.000 historiales farmacológicos y la implantación de medidas de ámbito estatal como la reducción de precio por medicamento, la prescripción por principio activo «y otras mejoras en los tratamientos».
Y es que el objetivo de Sanidad -donde va a parar la mayor parte del presupuesto de la Generalitat- es contribuir a reducir la deuda de 21.000 millones de euros y ser parte importante del ahorro previsto de 2.500 millones.
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