Iberia no cede pese a la amenaza de los sindicatos

MADRID– Iberia mantiene su postura. La compañía insistió en que el cierre de la nueva filial de bajo coste Iberia Express «no es negociable». Así lo indicó ayer el presidente de la aerolínea, Antonio Álvarez, quien dijo que «mantendrá las negociaciones abiertas». La compañía accederá a tratar asuntos relacionados con el convenio colectivo, pero dejó claro que las decisiones empresariales «sólo corresponden al grupo», y no a partes externas. Aun así, Iberia valora el interés del Sepla en retomar las negociaciones del VII Convenio Colectivo y los cita para el próximo martes 17 de enero. Por su parte, el Sepla detendrá la convocatoria de huelgas mientras duren las reuniones. El jefe de la sección sindical, Justo Peral, informó de que «la intención de los pilotos es negociar sin la presión de los paros», debido a la negativa de Iberia a mantener reuniones desde que se anunciaron los anteriores. La huelga de ayer fue la cuarta y, hasta nuevo aviso, la última. El Sepla cuenta con el apoyo de UGT y CC OO, que han informado de que los tripulantes de cabina de Iberia (TCP) se unirán a los pilotos. El próximo viernes se reunirán de nuevo el Comité de Vuelo y el resto de colectivos para concretar las próximas huelgas conjuntas. En cuanto al cuarto día de huelga, desde que se convocó la primera en diciembre, transcurrió con normalidad. Se anularon 104 vuelos de los 188 programados y al cierre de esta edición ya habían operado el 75% de los trayectos. Los afectados fueron unas 10.000 personas, que fueron recolocados o a quienes les devolvieron el importe de su billete, por lo que la jornada no dejó demasiados «desencantados». Sin embargo, siempre hay pasajeros perjudicados, o por falta de información o por perder la conexión de su vuelo, que se reúnen en los mostradores en busca de soluciones. En cuanto al paro, el Sepla ya propuso un nuevo modelo para los vuelos domésticos y europeos (los que cubrirá la «low cost») que ahorraría un 50%, pero la aerolínea los rechazó. Los pilotos mantienen que la creación de Iberia Express vulnera el convenio colectivo y que se ponen en peligro sus empleos y sus condiciones laborales, sobre lo que la aerolínea «aclarará las dudas».

Los testimonios de los afectados

Milagros Viaña y Eleonor Alfaro / Compañeras de viaje
«NADIE NOS AVISÓ»
El retraso de tres horas del trayecto Málaga-Madrid provocó que la mayoría de los ocupantes del avión perdieran sus conexiones con Iberoamérica. «Por teléfono nos dijeron que no había problemas, pero en el aeropuerto, vimos que no teníamos vuelo» contó una de las pasajeras, indignada.

Antonio Gil y Pedro Martínez / Amigos
«NO SE HACEN CARGO»
Estos amigos se enteraron de la huelga por las noticias y lo que era un viaje de un día a Dubái se convirtió en tres días. «Volábamos con Iberia, pero nuestro billete era de British Airways, por eso ahora Iberia no se hace cargo de nada. Alega que el que cobra es el responsable. Pero, ¿no se han fusionado?» preguntó Pedro.

Ángel Campuzano e Inma Lucena / Matrimonio
«NO TENÍA ASIENTO»
Cuando esta pareja iba a coger su avión para Nueva York, se dieron cuenta de que sus asientos no existían. «Mi estatura me obliga a reservar un asiento especial, pero por las anulaciones de la huelga han cambiado el tamaño del avión y ahora tengo que viajar seis horas ‘encogido'» se quejó Ángel.