El baúl de los recuerdos de La Villa

Los objetos almacenados proceden, en la mayoría de los casos, de desahucios, intervenciones en la vía pública para retirar terrazas que incumplían la normativa vigente, ventas ambulantes e ilegales o mobiliario municipal.

Todos ellos acabarán siendo subastados o reutilizados por dependencias municipales que los requieran, siempre que no sean reclamados por sus propietarios. En caso de que esto ocurra, los dueños contarán con un mes, prorrogable a dos, para su retirada; pero eso sí, deberán abonar los costes recogidos en la Tasa por Prestación de Servicios de Retirada, Transporte y Almacenaje: 147,2 euros hasta ocho metros cúbicos de material, 18,4 euros por metro cúbico de más y 40 céntimos de euro por metro cúbico por cada día de almacenaje.

En cualquier caso, el Ayuntamiento guardará los objetos hasta un máximo de dos años antes de ser subastados. En el caso de ropas y calzados que no se hayan identificado como falsificaciones, serán donados a la empresa Humana; sin embargo, si se constata que provienen del tráfico ilegal, se enviarán a la incineradora de Valdemingómez.

Lo mismo ocurre con los cd's de música y dvd's que se califiquen como piratería. En el resto de objetos, todos acudirán a subasta pública en caso de que no se reclamen o podrán ponerse a disposición de los ayuntamientos que los necesiten.

Se han llegado a encontrar letreros de bares con el menú del día y con ofertas. También, un calamar gigante y un langostino que funcionaban como decorado de un restaurante, así como paneles de rayos UVA. En general, de las casas, la mayoría de elementos almacenados son sillas, mesas, neveras, lavadoras y demás aparatos domésticos.

Desde el ayuntamiento aseguraron que «el coste del Almacen de Villa es mínimo». Pero también hay beneficios, aunque no son para tirar cohetes. En los sietes meses que va de año se han producido 29 retiradas, aportando alrededor de los 2.500 euros a las arcas de la adeministración.