Cuba

Suprema de ordinariez

La Razón
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El título puede parecer un segundo plato de restaurante, pero no, me refiero a la inmarchitable Belén Esteban. En su programa «Sálvame» logró tres estrellas Michelin con su suprema de ordinariez. Sus últimas vacaciones no la han relajado, más bien la han puesto al borde del ataque de nervios, al menos es lo que desprende su actuación del miércoles. Si estoy en casa por motivos profesionales, zapeo por los distintos canales. Procuro poner «Sálvame» en sus primeros minutos, cuando hay una especie de dramatización entre los colaboradores. Belén se desmadró, como si fuera una Ana Magnani de arrabal. Lanzó sus misilazos contra muchos. De Jesús Mariñas dijo que cuando iba a Cuba, a la vuelta no podía ni sentarse. Afortunadamente Jesús es uno de los más curtidos periodistas de este mundo rosa, como para que le afecte semejante burrada. Belén siguió sus ataques contra los políticos en general y el Gobierno en particular. Les quiso dejar claro que ella hace lo que le sale de «to el...»; además, les amenazó con presentarse a las próximas elecciones generales, para que se enteren de quién tiene de verdad la fuerza del pueblo. Esta tremenda amenaza, de producirse, no afectaría al Gobierno, que ya está amortizado; el gran perjudicado sería Mariano Rajoy, que en estos momentos tiene todas las cartas para ganar. Pero si se presenta el «BEOE», el Belén Esteban Ordinario Español, le puede cerrar el camino, que tenía ya prácticamente hecho hacia La Moncloa. Lo único que podría frenar la debacle es la cuestión de las incompatibilidades: no creo que se pueda estar al frente del Gobierno y trabajando en «Sálvame». Lo verdaderamente interesante es saber si Belén ya tiene un gobierno pensado. ¿Qué ministerio le daría a su marido? A Jorge Javier sin duda le daría la cartera de Fomento; a Karmele la haría ministra sin cartera para asuntos catalanes; a Rosa Mohedano, ministra de Cultura; a Kiko Matamoros, ministro de Defensa; al otro Kiko, ministro de insidias y varios; indudablemente, el Ministerio de Exteriores sería para Juan el Golosina. Ya ven que banquillo no le falta.